Mi Añorada Valencia nos presenta esta reseña sobre la época de los comienzos de la radio en Valencia: «Bailando se goza más».

La radio, no fue antes tan fastidiosa como lo es hoy en día, por haberse fundado con intenciones comerciales y culturales, donde se daba cabida a las noticias, la música clásica e instrumental y las voces líricas y populares que constituían el entretenimiento de la familia y de cada «oyente» en particular.

Es por ello que en estos tiempos, existe una marcada preferencia por los espacios de A.M Y FM, el único medio auditivo capaz de excitar la imaginación en la creación de los más hermosos escenarios. Cuando se llevan a la radio, programas «en vivo», podemos formar imágenes en nuestra mente, difícilmente obtenibles con el arduo trabajo de construir escenografía e iluminación, como en la TV. Basta que el locutor «comunicador social por excelencia», sea capaz de describir la escena, para que nuestros sentidos perciban a plenitud su desarrollo.

Cuando el «Tío Nicolás» nos refería los cuentos de Tío Tigre y Tío conejo, o Don Rafael Guinand, nos llevaba en alas de la imaginación a los mas apartados rincones del país con su «Galerón Premiado», vivíamos realmente la emoción de estar allí, compartiendo con él humorísticas referencias:

-Aló? Aló…? Hablo con Caicara..? Aquí, Caracas llamando!

– Aló? Sí! Caracas llama! Esta por allí, Don Pirujo Valderrama?

La «conversación» era de un solo lado:

– Ajá, ¿Pirujo..? ¿Qué tal..? ¿Que las calles están rotas? ¿Qué hace un mes que no botan las basura? Ah no..! de eso no puedo decir nada..! eso está prohibido..! Basirruque no monta en coche..! Barajo el tiro..! Ah? TAMPOCO! Ah?… menos! Bueno, apriete el hombro contra el taburete! Y pare bien la oreja, Don Pirujo, para que escuche su Galerón…!

De inmediato, Don Rafael se dirigía a Don Vicente Flores, quien con «sus llaneros», empuñando diestramente su «mandolina» acompañaba a Josefina Rodríguez «la gitana de color», y sobre los primeros compases recitaba Don Rafael:

Bailando se goza más

Desde Caicara reporta, Don Pirujo Valderrama…!

Y en el reporte justicia, para su pueblo reclama…

Es una queja valiente, que desborda su emoción…

Muchachos a darle duro!.. Que suene duro ese són…

En Caicara esta escuchando, el autor del galerón!
Una vez por semana o todos lo días, por alguna emisora caraqueña que claramente podíamos escuchar, las divertidas noches de los años 40, nos traían otros programas, como la «Familia Buche y Pluma» de corte humorístico o «Cada minuto una estrella» del tipo musical con «Talento Vivo».

La radio valenciana no se quedaba muy rezagada y gracias a la iniciativa de gente con vocación para el arte, como los hermanos Aché propietarios de la Radio Valencia, Santiago Sánchez González y los hermanos Morales Routmann de la Radio 810. Manolo Fachín de Boni y «el padre Heredia» de Radio América y mucho antes, el personal profesional de La Voz de Carabobo, mantenían para beneplácito de los «radio-escuchas» programaciones similares.

 

Valga pues, este relato, para rendir un homenaje a quienes han significado verdaderas glorias de nuestra radiodifusión.

No podría mencionarlos a todos, así que, en este mi libro, sólo voy a referirme al que me ha servido como título: BAILANDO SE GOZA MAS…! Crisol de vocaciones profesionales…!

Los días Domingo, a mediados de este siglo 20, que no acaba de terminar, todavía no había llegado la televisión, ni el VHS como para quedarse en casa disfrutando de las cintas cinematográficas.

El «entretenimiento» era pues, la radio…!

Aun cuando ya existía el jueguito del 5 y 6 nacional, el sellado de las «papeletas» terminaba el sábado y la gente que por las mañanas acudía a la misa y a la «retreta» en la Plaza Bolívar, o las funciones el Teatro Municipal o del «moderno» Teatro Imperio, incluyendo los famosos «vermouths danzantes dominicales», dedicaba las tardes a pasear por nuestra hermosa y fresca Avenida Camoruco, a pie o en el tranvía y de quedarse en casa, escuchaba a los Hermanos Halabí, Miguel y José, por la Radio 810. En «La matinée del 5 y 6».

No había manera de competir hasta que el primer actor y locutor Agustín Gregorio Moreno, creo el espacio «Bailando se goza más» por «La Voz de Carabobo», en ese mismo horario. No solo era un programa de radio sino también una «escuela» donde se forjaron muchísimos talentos de la época, despertando valiosas vocaciones. Yo compartí con Gregory Moreno, el prestigioso programa que formó actores, de radio, teatro, cine y posteriormente de televisión, sumando amigos que son, hoy por hoy, verdaderos baluartes de la radiodifusión venezolana. Ah…! Y con el tiempo, Gregory y yo, pudimos comprobar que BAILANDO SE GOZA MAS acaparaba la sintonía dominical…!

Este programa radial, combinaba la música bailables con los «resultados» de las carreras válidas para el juego 5 y 6, respetando que los Hermanos Habali, y la emisora Radio 810, ya estaba re-transmitiendo las pruebas realizadas en el Hipódromo de la Rinconada, en Caracas y era «cuestión de ética profesional el respetar esa condición limitándonos a mencionar los «caballos y jinetes ganadores» de cada competencia, así como los dividendos y otras menudencias relativas a la hípica.

En el transcurso de las cuatro horas de programación, repetíamos los resultados y escrutinios, aprovechando de hacer escuchar música «bailable» en forma de «sets» a la usanza de la época.

Terminadas las competencias hípicas, a las seis de la tarde, dábamos a los oyentes el regalo de una parodia denominada «Radiodifusora Perolitos», cuyos libretos había acumulado desde hacia cierto tiempo y que mucho después, finalizando la década de los 50, escuché por las estaciones caraqueñas, con el nombre de Radio Rochela Radio…!

En esa «Radiodifusora Perolito» actuamos: Gregory Moreno, Julio Rico, Napoleón Rivero, Carlos José Delgado «Mister Chuqui», Gildred Arocha, Lázaro y Dona Rufa (dos simpáticos personajes del gran Julio Centeno), «Okito» quien años mas tarde, creó el famoso personaje la muda candelaria» a través de Radio América, así como también: Domingo Araujo Jiménez, lamentablemente desaparecido en plenitud de facultades, Rafael Arévalo, actor cinematográfico, Antonio García Tirado, Benilde González, Héctor Lugo «Luguito» y en musicalización el trágicamente desaparecido José Antonio Burgos. Libretos de Carlos Delgado Niño.

Para el recuerdo de los radio-escuchas de este medio siglo, nos ha sido grato el evocar a: «BAILANDO SE GOZA MAS»…!

 

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