El recién electo consejero constitucional de Chile del Partido Republicano (derecha), Aldo Sanhueza, renunció este miércoles tras el escándalo que provocó una acusación en su contra por delito sexual.

Los hechos se remontan a marzo de 2019, cuando una mujer denunció tocamientos por encima de la ropa por parte de Sanhueza, durante un viaje en autobús a la ciudad de Concepción, al sur de Chile.

El republicano fue detenido por la policía e imputado por la fiscalía por el delito de «graves ofensas al pudor». Tras la audiencia ante el juez, el tribunal acogió la solicitud del Ministerio Público de la «suspensión condicional del procedimiento» por un año y decretó la prohibición de no acercarse a la víctima.

 

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El presidente del Partido Republicano, Arturo Squella, confirmó que Sanhueza había decidido dejar la colectividad para no afectarla mientras ejercía su derecho a la defensa.

«Presentará su renuncia al partido para defenderse como corresponde, porque siente que han recaído calumnias sobre él y tiene todo el derecho de hacerlo», explicó el presidente de los republicanos”, declaró.

Esta ausencia hace que la fuerza de derecha pierda un consejero constitucional y baje a 22 escaños en el órgano que redactará la propuesta de nueva Constitución en Chile.

 

No obstante, el partido fundado por José Antonio Kast, partidario de mantener la actual Carta Fundamental heredada de la dictadura, conserva el poder de veto y, si se suma a la centroderecha, se hace con el control absoluto del órgano.

Sin embargo, ambas fuerzas por separado pierden el quórum supra mayoritario de 2/3 del Consejo (34 miembros), necesario para definir las normas en disputa.

 

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Ciudad Valencia / Telesur

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