Un «despelote comunal», como lo llamaron los propios vecinos, colmó la paciencia de un gran número de habitantes del barrio Los Chorritos, ubicado en la parroquia Tocuyito, municipio Libertador, del estado Carabobo, durante una jornada de distribución de gas el pasado fin de semana.
El descontento fue notorio a consecuencia de la supuesta falta de organización que existe por parte de los voceros comunales designados para coordinar y organizar dicha jornada.
Las quejas y el malestar que se apreció entre los vecinos tienen su origen en que hay que esperar más de tres meses para que entreguen los cilindros de gas, después de eso, “calarse una enorme cola que comienza desde las 2:00 de la tarde hasta al anochecer”.
Falta de comunicación
Los vecinos denuncian asimismo que la falta de comunicación también es un factor que agrava la situación, a pesar de que cada sector, con su jefe de calle, dispone de un grupo de WhatsApp para avisar sobre cualquier tema de interés comunitario.
Por otra parte, denuncian también irregularidades durante la jornada del gas, porque algunos cilindros «se extravían», o los cambian por otros más deteriorados, aparte de que otros cilindros «llegan fallos».
“Cómo es posible que hay que esperar más de tres meses para retirar una bombona y después encontrarte con este despelote que no tiene ni pie, ni cabeza”, dijo un adulto mayor, al mismo tiempo que agregó: ¿»Por qué no organizan bien este tipo de jornada, mientras que en los demás sectores no ocurre este problema»?.
«Este despelote comunal es una vergüenza»
Una de las vecinas afectadas, al manifestar su descontento, expresó: “Vamos para atrás como el cangrejo; parece ser que los voceros comunales no han aprendido a trabajar como debe ser el 1X10 del Buen Gobierno, y no vengan a decir que esta situación también es parte del bloqueo”.
Además, destacó también que todo este proceso de atención y suministro del vital servicio ha venido en deterioro, debido a que en las comunidades no existen espacios para distribuir el gas y las estanterías comunales, que una vez se implementaron, “dejaron de funcionar desde hace mucho tiempo”.
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El clamor de los habitantes de Los Chorritos, en sentido general, es que haya una mayor organización por parte de los voceros comunales para minimizar las quejas en cuanto a la distribución del gas, y que estas jornadas se realicen periódicamente para acortar el tiempo de espera.
Wilfredo Sandoval / Ciudad Valencia
