Un informe de investigación, titulado «Estados Unidos, responsable de la propagación global de la COVID-19» revela los datos de múltiples fuentes que han demostrado que ese país es probablemente donde se originó la epidemia de covid-19 y el de mayor responsabilidad en la rápida propagación global del virus.
Su manipulación política de la enfermedad ha hecho que los esfuerzos globales contra la pandemia sean particularmente difíciles y desafiantes.
El informe fue emitido conjuntamente por Intelligence & Alliance Think Tank y el Instituto Taihe, destaca Xinhua
El informe señala que las evidencias que apuntan a que la COVID-19 se originó en Estados Unidos han continuado surgiendo. Por ejemplo, la línea de tiempo del brote en Estados Unidos ha sido continuamente antedatada, el rol del ejército estadounidense está vinculado al origen y la propagación de la COVID-19 y los primeros casos en muchos países están vinculados a Estados Unidos.
EEUU la «fuerza principal de la propagación mundial de la COVID-19
Llamando a Estados Unidos como la «fuerza principal de la propagación mundial de la COVID-19», el informe dice que el país dejó pasar el mejor momento para contener la pandemia en una etapa temprana.
Su política a puertas abiertas acelera la propagación mundial del virus, y su repatriación irresponsable de inmigrantes exportó virus a todo el mundo.
Las tropas estadounidenses estacionadas en el extranjero han violado repetidamente los protocolos de prevención de epidemias, acelerando la transmisión, señala el informe.
El fracaso del país para controlar la COVID-19 en eventos internacionales ha llevado a la «superpropagación» del virus y sus sanciones unilaterales han resultado en una crisis humanitaria, agrega el texto.
Además, señala que la manipulación política de Estados Unidos ha hecho más difícil la lucha mundial contra la pandemia, ya que el país eludió la responsabilidad de la prevención de la pandemia, lo que socavó los esfuerzos internacionales contra la enfermedad.
Propio interés político
Estados Unidos ha estado obsesionado con su propio interés político y ha evadido la debida responsabilidad, indica el informe, añadiendo que la polarización política dañó tanto a Estados Unidos como al mundo en general.
En conclusión, el informe afirma que a medida que la pandemia de COVID-19 continúa haciendo estragos, en particular con la aparición de cepas mutantes que han aumentado la incertidumbre sobre la futura respuesta mundial a la pandemia, Estados Unidos debe abandonar su obsesión por el propio interés político y reflexionar sobre sus principales errores en la prevención y el control de la epidemia.
También insta a Estados Unidos a dejar de politizar el coronavirus, dejar de socavar la cooperación internacional antipandémica, compartir activamente sus vacunas con el mundo, llevar a cabo investigaciones de rastreo de los orígenes de una manera científica y facilitar la recuperación económica mundial, de modo que la pandemia de COVID-19 sea finalmente derrotada.
Ciudad VLC/ÚN
