El facesitting es, literalmente, sentarte en el rostro de tu pareja mientras disfrutas de una sesión de sexo oral.
Lo mejor de todo, es que en esta posición la mujer tiene el poder, pues puede controlar la intensidad, la velocidad y el ritmo en el que es estimulada.
Sin embargo, existe una gran variedad de posiciones sexuales que podrían revivir la llama de la pasión en cuestión de segundos, por ejemplo, el facesitting, una placentera e innovadora forma en la que puedes llegar al orgasmo con ayuda de tu pareja.
¿Qué es lo que debes hacer?
Es sencillo: siéntate con total libertad en la cara de tu pareja y comienza a masturbarte contra su boca, nariz y barbilla; tu posición le facilitará la práctica del sexo oral y te será más fácil alcanzar el orgasmo.
Algo que no debes olvidar es el movimiento pélvico, descubre cuál es el ritmo o la velocidad que te hace sentir más placer y sencillamente déjate llevar. Eso sí, procura no dejar caer todo tu peso sobre tu pareja, pues eso podría dificultar su desempeño.
¿Cómo debo sentarme?
De frente
Dobla tus rodillas (o bien, ponte en cuclillas) mirando en dirección a su cara y siéntate sobre su rostro. Abre las piernas de forma que tu pareja pueda tener total acceso a tu zona íntima (vulva, clítoris, etc.).
De espaldas
Consiste en lo mismo que la primera posición, solo que ahora en lugar de ver a tu pareja de frente, le darás la espalda con la finalidad de que también tenga acceso a tu ano. ¿Te animas a intentarlo?
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Ciudad Valencia / Cosmopolitan
