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Luis Alberto Angulo, autor de la Columna de Ciudad Valencia "Sábado"

SÁBADO / Humus de Leonardo Alezones Lau

 

Entre los poetas de las últimas generaciones nacidos en Valencia —estado Carabobo—, Leonardo Alezones Lau, descuella por su tenacidad creativa, su lúdico experimentalismo verbal y la intensa búsqueda de un ars poética vinculada a la estética de tendencia surrealista de asociaciones libres, cuya fuente reside en el mundo onírico del inmenso espectro del llamado inconsciente, donde reside la intuición, madre de la creación poética.

 

Los signos de esta poesía mantienen el sustrato oscuro inicial de la nigromancia, del alucinio oracular y del hallazgo adivinatorio, sin embargo, en su desarrollo se siente la voluntad de ruptura del autor y la necesidad por construir un universo poético capaz de expresarse de forma inteligible y encontrarse con el lector.

 

Las influencias más notables de esta poesía son a mi modo de ver la de Teófilo Tortolero y la de Gelindo Casasola, poetas alucinados, uno de la promoción de los sesenta y otro de la llamada Generación de los Ochenta. Alezones posee un profundo sentido de la corriente literaria que siente le corresponde y a la que aún con su evidente ruptura formal adscribe  críticamente, las dedicatorias a los poetas en su último libro, significan más que la expresión afectuoso, la propuesta de un canon literario que asume con convicción y alegría. En tiempos de parricidio y amnesia literaria siempre es notable y reconfortante el surgimiento de voces como la de Leonardo Alezones, poeta y artista plástico de Valencia.

 

 

POEMAS DE HUMUS

 

Foto: Marhisela Ron

 

Para mi Generación

 

soy el poeta del hongo

ya llegué aquí

imito para aprender

¿existe o no la falsa humildad?

hubo un tiempo

en que me sentía menos

y me parece bien

si has conocido ese sentimiento por un rato

golpeo los barrotes de mi celda y nunca estuve encerrado

dato curioso

¿un hombre no es nada sin una posición política? ¿un hombre no es nada si no es explotable?

¿o si no explota a alguien?

por amor tuve el rendir pleitesía

aprendí más de los dibujos animados que de los hombres

valiente frase

un tiempo odié a los que idolatraron a ese gran trovador “nunca conocí a un hombre sabio y si así fuera será mujer”

su muerte

me enseñó a entender el valor irónico de la vida una vez que se convirtió en lo que combatía eligió desaparecer

hubiera usado miel y hormigas para que fuera una dura tarea

tengo amigos

zombies de la droga homosexuales lésbianas sádicos asexuales planetarios locos nazis racistas

[niggros vándalos punks zambos estafadores ninfómanas infieles

[marginales holgazanes narcisos nihilistas fanáticos religiosos atrofiados

clasistas ladrones celópatas llorones que se prostituyen ah y también están los que se autoflagelan

me siento orgulloso de ellos

de mi parte basta el decir que no he hecho nada

y he pelado una naranja mientras fumo un cigarrillo

 

Égloga

 

A César Seco

 

que yo tuviera otra casa

no sería ésta la cosa

que yo tuviera otro sol

en donde pueda contemplar tu anochecer

la hice de piedra

donde un lagarto

tendió sus escamas al morir soy diferente

no tomé ese asbesto

quise amasar su dureza entre bosta y leche

hasta sanar mi tos

de modo irreversible

si mi casa es una piedra

no la guardes de amuleto échala al río

por si pudiera deleitarse con el ruido de las aguas

y el paso de los peces

 

 

Poema improvisado

 

Para Rafael Cadenas

 

ver en la humanidad

no a semejantes

sino a intrusos

que falsifican la llave de nuestra alma con la suya

y no tienen la sutileza

de filtrar con ella el rayo de sol

para los dioses que inventamos en el barro

 

 

Poema punk

 

Para Juan Manuel Carrasco

 

al poema sería beneficioso romperle una silla en la espalda

por el canto de los imperdibles colgados en la oreja insurgente

por los cardenales a cielo abierto nacidos con cresta

y darle toda la anarquía y la desidia cuando sean necesarias

para doblegar a quienes no lo merecen

 

 

¿Orden?

 

A Miguel James

 

tengo dos pares de palabras

y un sinónimo de brutalidad

improvise o no

aquí van

¡qué se joda la policía!

son el primer peldaño a subir

para acabar con los ladrones de cuello blanco

y la última escalera para descender

a los infiernos del tercer mundo

si por cada ciudadano honesto

que pierde parte de su salario

en manos de estos muñones

fabricásemos una bomba casera

no habría necesidad de dedicarles ninguna porquería dado que han corrompido la atmósfera de aquellos poemas escritos por quienes los odiamos

 

 

Zoloft

 

A Enrique Hernández D’ Jesús

 

quemaste una guitarra en el marco de la puerta

su madera te duele y te perfuma

astillada sobre el mármol de infiernos menos blandos esas ánimas abombadas por los calores en bajorrelieve no tienen un cuello de camisa percudido

ni lenguas de vaca para sus zapatos

ya mismo quiero

escuchar un jodido precio por tu alma pagaría con gusto y la echaría al río

por todo el yodo el romero y el silicio de casa

ahora me cuentan que has cambiado mucho que estás estudiando farmacia

 

 

Mantra

 

Para Luis Alberto Angulo

 

aquí no cabe la sed de ningún redentor

mucho menos la imitación de las formas naturales

es dios el que rige sobre todo lo viviente

 

 

Hidra

 

A Carlos Enrique Delgado

 

así como la vida incesante no repara en sustraerse seré un agrío verdor

cavilación de una esponja a unos mangos en alto

y por nuestro paso la caída del semblante hace torva mi caricia a ras de lluvia

 

 

Dulce absoluto

 

Para Reynaldo Pérez Só

 

cuando la flor se cierra para formar el fruto guarda del mundo su belleza

dando volumen a su deseo

todo lo que crece en ella late

tan despacio como imperceptible

y es verdor lo que predice la dulzura y tonto humanizarla en el lenguaje el no poder asir lo que le ocurre

sin volverla un reflejo de nuestro ser

 

 

El becerro de oro

 

A la Memoria de Ana Enriqueta Terán

 

nos debemos el gran hallazgo de nosotros mismos

el develamiento de nuestra estatua

mirar por el ojo

de todas las puertas

hasta hacer caer las que nos separan

al fin y al cabo

podemos inventariarnos entre las figuras

que adorábamos al ser castigados en el gran libro

 

Ulises

 

A Miguel Márquez

 

intenté volver hasta aquí todo era diferente ¿sentiría lo mismo?

una y mil vicisitudes

el revés de grecia

en un pájaro de asfalto la tierra otro derrame si llego a ver

el pubis traslúcido

y estéril

gaznar sobre afrodita

de nuevo

quemaré su despojo

para tener plumas

inventando otra deidad

bajo el amparo de los expatriados

 

 

Blues del canario minero

 

A Víctor Manuel Pinto

 

la poesía ha hecho de mí

ese canario que metían a las minas para avisar con su silencio

la presencia de gases letales

ahora que estoy a nada de callar

a la altura de su lámpara

no quiero dejar de cantarle

 

 

Frogstomp

 

A María Alejandra Rendón

 

han vuelto los sapos

yo estaba despierto y

nada pudo acallarlos salvo estos árboles

cayeron desde el cielo que advirtió sus quejas allí estaba la tiniebla

inventándoles un plumaje

se creyeron pájaros y cantaron toda la noche

 

 

Gnomo

 

A Carlos Osorio

 

duende

si estás en mi sangre échate al oro

porque es cierto

se presta al estallido de tus formas

hoy

posado sobre una piedra

me recorren

las campanas de un líquido bemol

toco mi frente para no olvidarlo en lo que resta de mis luces

la naturaleza es para reducirse

 

 

Tacarigua

 

A Alejandro Oliveros

 

alguna vez

quisimos robar el vellocino aunque no fuera

la venus del lago

de donde somos

nunca fue malo

nunca fue bueno

pero nuestros dioses nos olvidaron

 

 

Veguero

 

Para Adhely Rivero

 

si a mi paso las flores tiemblan

tiemblan los ríos

es porque mi caballo tiene las encías rotas

el perfume es parte del acto de tocar este día

y la leche que salpicó verdores

desde los ordeños

es un quejido de estrella que hirió el pecho que nos dieron

el río tiembla y la casa construida

es piedra de un sol que canteó nuestros olvidos el día es amable en pensamiento

yo me voy con mi sombrero a cazar mariposas

todo se lo han llevado las aguas

con mi caballo tan solitarios en el mundo esperamos que una araña vuelva sobre ella misma a tejer las flores idas a marchar los mares

juzgando la claridad

entramos a los matorrales y allí

cada galope dado revienta el espejo

donde nos miramos cuando el agua viene de vuelta

 

 

Índigo

 

A María Antonieta Flores

 

arreamos las libélulas

mientras dure su vuelo

para que se empiecen a comer

unas a otras

parecen el destino de la humanidad

algo tan inaceptable en nosotros

como la ola de formol

tratando de preservar el cuerpo de alguna

a los ojos de los niños y los de una mosca azul

 

 

Refulgencia

 

A Juan Calzadilla

 

innovaciones

en el patio de casa descansan artefactos nunca pensados en bien de la poesía

hay ratas muertas que no se lleva el gato por pavor a heredar algo del polvo

de quien hubo visto sangrar mi ombligo

cuando una manguera está rota las aves vienen a mirarse

a falta de mar y su reflejo acérrimo

ahora les digo

que sobra un cañón para ahuyentarlas de haber alguna posibilidad de cosecha

 

Réquiem

 

A Néstor Mendoza

 

habían cazado con trampas todo tipo de pajaritos

desde que amaneció

los desnucaron y desplumaron sus pequeños cuerpos frotados en canela

deslucían al sol de las doce

luego los guisaron en arroz

y uno no lo consideró digno de estar en un poema

 

Nocturno

 

Para Luis Alberto Crespo

 

florecimiento

la rosa desde una espina canta su silencio

y espera al rocío

para enjoyar cada pétalo

 

Dragón

 

A Virginia Moreno Goitia

 

el arte es cosa del diablo decían

¿cuál sería entonces nuestra condena

frente a tal orfandad?

quedaremos confinados a oficios innobles podar quitapesares

nombre que acabo de poner a una flor desconocida

¡a nadie importa!

salvo a quien sucumbe deseoso

de cobrar existencia fuera de la voluntad divina a la luz de la verdad

me llené de anhelos imposibles

cumplí el tenebrario de un dragón

sus ojos repletos de paisaje

lograron engañarme cuando cayó

y traté de renegar ese designio

ardiendo con las hojas secas

desde el último equinoccio

 

***

 

Luis Alberto Angulo [Rivas]. Poeta, promotor, animador cultural, editor literario y articulista nacido el 13 de enero de 1950 en Barinitas, estado Barinas, residenciado en Valencia. Autor de los libros Coplas de la edad ligera (2021), Antología del decir (2013), y La sombra de una mano (2005), publicaciones de Monte Ávila Editores  (Colección Altazor), así como de Fusión poética (2000) en la Universidad de Carabobo; tomos que compilan su obra poética integrada por una veintena de poemarios. Obtuvo el Primer Premio del IV Concurso Internacional de la Revista Poesía (UC). También es premio nacional de poesía Dr. Francisco Lazo Martí del Ateneo Popular de Calabozo y Primer premio de poesía de la Universidad Rómulo Gallegos en San Juan de los Morros. Ha publicado selecciones poéticas de San Juan de la Cruz, Miguel Hernández, Enriqueta Arvelo Larriva, Ana Enriqueta Terán, Lubio Cardozo y de Ernesto Cardenal (de quién es prologuista de la única edición en vida de su Obra poética completa), así como la antología Rostro y poesía, Poetas de la Universidad de Carabobo.

 

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