“Koto, Goto: Cúcuta” por Elio Araujo

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“Las partículas Cota y Cuta de sus gentilicios no son otra cosa que el Coto, Cote o Goto, que en los dialectos caribes tienen el significado de gentes o nación y que se encuentra en muchos de sus gentilicios como Cumanagoto, Ciparicote, …etc.”. “Los Cúcutas  y Chinácotas” (A. Jahn; II: 100).

Goto es la deformación de Coto, como muy bien lo señala Humboldt en el año 1800: “Los Cumanagotos (o según la pronunciación de los indios, Cumanacoto), hoy al Oeste de Cumaná en las misiones de Píritú, donde viven como agricultores más de 26.000”. (Viajes, II: 204).

¿Cómo pasó de Koto a Goto?

En la lengua tupi-guaraní, en algunas palabras que comienzan por la letra K, la sustituyen por la letra G. Esto porque la pronunciación de la K es muy fuerte y la de la letra G es más suave, por eso y por  preferencias de razones de sonidos agradables, armonía y consonancia, hacen este cambio. La permuta de la K por la G, se observa en el siguiente ejemplo: “Gotyo: forma eufónica de Kotyo, posposición: hacia”. (dicc. guaraní, 2016: 182).

Ya se sabe que Coto y sus variantes es “gente, nación, tribu” ¿Pero qué clase de gente? ¿Qué particularidad especial tenía esa gente?

Coto es corrupción de Cötö (Cutu). “Bocio, papera, hipertrofia de la glándula tiroide” (dicc. quichua, 2008: 132, 401). Lo escriben también Koto o CCoto (L. Alvarado, I: 140) y Q’utu (dicc. quichua-Laime: 99). La vocal original quichua Ö (U) se transforma en la vocal castellana O.

El bocio o papera es producido por la deficiencia de yodo. Es común es los países montañosos, porque las aguas arrastran desde las alturas este elemento. En la cordillera de Los Andes (de donde son originarios los quichuas) era común, por eso las autoridades sanitarias obligaron a que le agregaran yodo a la sal.

Cuando en el año 1668, ponderan las bondades de la ciudad de Trujillo por su gran producción de frutos, ganados y animales domésticos y mucha población indígena, le consiguen un solo defecto: “criarse en la garganta de sus habitadores, principalmente en las mujeres, hinchazones o paperas, con tanta generalidad, que es rara la persona que se ven sin ellas, y algunas tan crecidas, y diformes, que causa horror el mirarlas”. (Oviedo y Baños, libro III, cap. XII: 250).

Los caribes llegaron 100-150 años antes de Colón, entre los años 1350-1500: “En las postrimerías del siglo XIV o los comienzos del XV, el movimiento migratorio de este grupo emprendedor y fuerte, que inició desde el centro de Brasil (Matto Grosso) y que hubo de convertirse en una marcha de conquista por los territorios que demoran al Norte del Amazonas de donde seguidamente extendió su dominio sobre las Antillas Menores y ya había comenzado a invadir las Mayores, por la parte oriental de Haití, a la llegada de Colón”. (A. Jahn, I: 31, 32).

La colonización forzada de los Caribes la describe Humboldt: “La costumbre bárbara que tenían estos pueblos de matar a los prisioneros masculinos y de reducir a la esclavitud a las mujeres de los vencidos. Cuando los Caribes hicieron su irrupción en el archipiélago de las pequeñas Antillas, llegaron como una horda de guerreros, no como colonos acompañados de sus familias. La lengua de las mujeres se formó allí a medida que los vencedores contrajeron alianzas con mujeres extranjeras. Eran estos nuevos elementos, palabras distintas de las palabras Caribe que, en el interior de los hogares, se transmitían de generación en generación, pero sobre las cuales la estructura, las combinaciones, las formas gramaticales de la lengua de los hombres ejercían su influencia”; “el dialecto de las mujeres Caribes, en las Antillas, encierra los vestigios de un lenguaje extinguido”. (Viajes, tomo V: 20).

Ese grupo de tribus: Meregotos, Pariagotos, Kamarakotos, Paudacotos, Auaricotos, Guaricotos, Arinacotos, Cherigotos, Chiagotos, Paracaruscotos, Paracotos, Ciparicotos, Chinácotas, Cúcutas. Las tenían como tribus Caribes, pero la realidad fue que eran un meztisaje de Caribes con mujeres Arawakas.

Ciparicotes, Ciparicotos o Chipas. Chipa “mordaza, silencio” (dicc. quichua, 2008: 409). Ri, Rig “se transforma en… (dicc. Quichua, 2008: 469). Sería entonces “gente de origen quichua que se transforma en gente silenciosa (Caribe)” que esto es una característica caribe, cuando van a ser investidos caciques, tienen que pasar seis meses sin hablar (L. Alvarado, II: 216). Un mes para pasar de adolescente a adulto, y un mes también cuando les viene, la primera regla, a las niñas.

 

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Cumanagotos, la tradición oral dice “gente comedoras de quinchoncho”. Kumanda “poroto” (dicc. guaraní, 2016: 132). A la pequeña leguminosa Turnera ulmifolia la llaman Cumaná.

Meregoto sería por la contracción de Mercure (Licania pyrifolia). Entonces sería “gente comedora de merecures”.

El delicioso fruto Cotoperís, Cotoperiz, Cotoprix (Melicoccus oliviformis), parece provenir de Pishi “pequeño” (dicc. quichua, 2008: 459). Entonces sería “pequeñas paperas”.

Kul, Kuj, Kux, Ku “rubor, rojo, sangre” (dicc. mochica, 2002: 5, 17, 92, 140). Entonces Cúcuta sería “gente roja”. Razón tenían los guajiros de llamarlos “caras rojas”. Esto es una característica racial de nuestros amerindios, el color de piel cobrizo y rojo (rojizaino). Cuando los ingleses llegaron a América del Norte los llamaron (red skin) “pieles rojas”. Cuando el cacique choctaw, Allan Wright, en 1866, firma el tratado con el comisionado indígena de EEUU; lo hace en representación de Okla Humma, que en su dialecto significa lo mismo “gente roja”. De ahí se origina el nombre del estado de Oklahoma (EEUU).

 

Ciudad Valencia / Elio Araujo