“La mujer conquista la calle” por Ángel Omar García

0
200
Ángel Omar García González-Historia y memoria-4F-Hugo Chávez-rebelión militar
Ángel Omar García González: autor de la columna de Ciudad Valencia "Historia y Memoria"
A propósito del día Internacional de la Mujer

 

Amigas y amigos constructores de sueños, forjadores de esperanzas, una de las grandes conquistas sociales del siglo XX, no sólo en Venezuela, sino en el mundo en general, ha sido la conquista de la calle por la mujer. Un hecho que ha sido impulsado por la condición urbana que han adquirido los países, así como por la necesidad que han tenido que enfrentar las mujeres, en muchos casos solas, para llevar adelante la crianza y educación de los hijos; esto en medio de sociedades complejas que cada día imponen nuevos retos y demandas.

 

La inmensa mayoría hombres:

Si realizamos una encuesta entre personas con más de 70 años preguntándole cómo era el comportamiento social de las mujeres siete décadas atrás, y si a partir de esa información hacemos un ejercicio de imaginación y visualizamos las calles de cualquiera de las principales ciudades del país en la década de los cincuenta del siglo XX, una característica resaltaría inmediatamente: la inmensa mayoría de quienes transitaban por ellas eran hombres, no era costumbre que la mujer estuviera en la calle, y menos sola.

Para entonces se consideraba que su función estaba reservada a la atención del hogar, la crianza de los hijos, la enseñanza de los valores familiares y cristianos. En las escuelas la presencia de niñas era minoritaria, y no resultaba extraño, sobre todo en instituciones educativas de carácter religioso, hallar colegios solo de varones y en algunos casos de niñas. Y en las universidades, en la década de los sesenta, su presencia era casi inexistente.

Pero la complejización social a la que hemos aludido y la necesidad de resolver dramas humanos y personales, han conducido a la mujer a tomar unos espacios y a disputar un liderazgo social que estaba monopolizado por el hombre. No sólo han ocupado los espacios educativos que eran exclusivos y distintivos de la masculinidad: hace sesenta años muy pocas personas imaginaban una mujer ingeniera o abogada; también han tomado el control de su natalidad. Contrariamente a lo que decían nuestras bisabuelas y abuelas, incluso nuestras madres, que tuvieron los hijos que Dios les había enviado, hoy la mujer puede tener los hijos que desea.

 

Dos casos emblemáticos:

En parte ese grado de emancipación se ha debido a la persistencia y valentía de sus ideas, así como a una irreverente conducta que ha desafiado los cánones sociales en diversos momentos de la historia.

Un ejemplo de ello es Manuela Sáenz, quien rompió todos los convencionalismos de su tiempo negándose a ejercer el rol de dama de sociedad al que estaba destinada por su posición social y esposa de un ciudadano inglés. Su inclinación en favor de la independencia la llevó a participar en debates sobre temas exclusivos de los hombres: la política y la guerra.

Más tarde, tras iniciar una relación amorosa con el Libertador, su conducta no dejaría de ser motivo de fricción con otros jefes militares, ya que Manuela no sólo se empeñaba en usar pantalón y uniforme militar (una conducta considerada eminentemente masculina), sino que insistía en participar directamente en los combates. Esta conducta ya la habían asumido otras heroínas venezolanas como Juana Ramírez (La Avanzadora), Josefa Camejo, Ana María Campos o Domitila Flores, entre otras.

Durante el siglo pasado la participación de la mujer venezolana en espacios públicos se hizo sentir, basta señalar dos casos emblemáticos: La muy destacada figuración de educadora y dirigente gremial Mercedes Fermín en la organización y constitución del movimiento magisterial venezolano, fundadora, en 1931, de la Sociedad Venezolana de Instrucción Primara (SVIP); y en 1936 de Federación Venezolana de Maestros (FVM) y, años más tarde, de la Agrupación Cultural Feminista, organización que tenía como propósito la reivindicación de los derechos de la mujer.

Y Argelia Laya, la famosa Comandante Jacinta, destacada docente y dirigente social que abogó por el derecho de las mujeres a un embarazo seguro, y que en los años sesenta asumió la muy difícil tarea de la lucha armada; más tarde, incorporada al proceso de pacificación, destacó como parlamentaria en la bancada del Movimiento al Socialismo (MAS).

 

LEE TAMBIÉN: AUTORIDADES VENEZOLANAS CELEBRAN PARTICIPACIÓN Y LUCHA HISTÓRICA DE LA MUJER

 

Apoyar la propuesta:

La conducta y el ejemplo de estas mujeres abrieron el camino para la participación femenina en los diversos ámbitos de la sociedad venezolana. Hoy la mujer ocupa un rol protagónico en el liderazgo social en sus comunidades, disputa los puestos de jefatura laboral, demanda la paridad de género en la postulación a cargos de elección y representación popular y sostiene una lucha para alcanzar una vida libre de violencia.

A pesar de todos lo que se ha avanzado en materia de igualdad de género, aún continúan pendiente importantes y necesarias reivindicaciones que apunten al reconocimiento de los derechos de la mujer: el reconocimiento de la labor domestica como un trabajo, la no discriminación salarial y laboral, y el derecho a una vida libre de violencia, entre otros necesarios e importantes derechos.

 

Ángel Omar García / Ciudad Valencia