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José David Capielo autor de la columna Del Medanal Venimos

Desde inicios de este año se están celebrando los 49 años de la creación del “Sistema Nacional de Orquestas Juveniles e Infantiles de Venezuela”, conocido en forma simplificada como “El Sistema”, iniciativa concretada en 1975 por el maestro y músico venezolano José Antonio Abreu Anselmi (1936-2018), quien se propuso sistematizar la instrucción y la práctica colectiva e individual de la música a través de orquestas sinfónicas y coros, como instrumentos de organización social y de desarrollo humanístico.

El “Sistema” venezolano es hoy un importante referente mundial en el ámbito de la educación musical colectiva, como poderosa herramienta para el rescate social de la juventud, incorporando niños y adolescentes, principalmente de los sectores sociales de menos recursos, bajo el principio de la gratuidad. Tal señalé fue fundado por el maestro Abreu, economista, músico, organista, compositor y docente musical, nacido en Valera, estado Trujillo.

Abreu, en febrero de 1975, fundó la primera Orquesta Sinfónica Juvenil “Juan José Landaeta”, con jóvenes de diferentes partes del país, quienes realizaron un primer concierto de debut un 30 de abril en la Casa Amarilla, sede de nuestra Cancillería en Caracas. Allí interpretaron distintas piezas musicales de Mozart, Vivaldi, Bach y Handel, finalizando con nuestro Himno Nacional. Apenas a un año de su creación, tuvieron igualmente un éxito importante en el Festival Internacional de Orquestas Juveniles 1976, en la Ciudad portuaria de Aberdeen, al noreste de Escocia.

Todo el proceso cumplido por el “Sistema” en estos años, ha sido una labor titánica, nada sencilla, novedosa y con una pedagogía distinta a la tradicional. Luego de haber consolidado las dos primeras orquestas sinfónicas como agrupaciones profesionales, dieron inicio al proyecto propiamente dicho de enseñanza musical, con una orientación particular hacia lo social. Es de señalar que la educación musical desde el siglo XIX mantenía el criterio del virtualismo, no tomando en cuenta la participación creativa del individuo (y mucho menos de su entorno).

Acá se planteó el acercamiento a la realidad social a través de la música, desarrollando la imaginación a través de prácticas colectivas. Hubo cambios en la concepción antigua de la educación musical, donde el centro pasa a ser el individuo y no la música como tal. En el “Sistema” han aplicado el método pedagógico “Orquesta-Escuela”, con un acceso masivo a la formación musical, con clases colectivas y no individuales, como se hacía antes. La agrupación musical se transforma en un modelo a escala de comunidad, con interrelaciones propias guiadas, del trabajo en equipo para alcanzar un fin común. Hay además un componente afectivo, que ayuda a restablecer el tejido social, con un aprendizaje que es colaborativo.

En el camino recorrido destaca como para inicio de 1979, a través del entonces Ministerio de la Juventud, se constituyó  la “Fundación del Estado para el Sistema Nacional de Orquestas Juveniles e Infantiles de Venezuela (FESNOJIV), para capacitar al recurso humano. Luego a finales de 2007, el propio presidente Hugo Chávez Frías, anuncia junto al maestro José Antonio Abreu, lo que denominó Misión Música, donde se propuso ampliar toda la labor desarrollada, estableciendo como meta la incorporación de al menos un millón de niños y adolescentes al “Sistema”. Se reafirmó su línea de aprender tocando. Tocando, luchando y reinventándose a sí misma como escuela. Surgieron allí nuevos proyectos.

En 2010 el “Sistema” fue adscrito a la Vicepresidencia de la República y se decide una mayor promoción. En 2011 la fundación cambia de nombre a “Fundación Musical Simón Bolívar”, adscrita al Ministerio del Despacho de la Presidencia de la República, pasando a ser un ente legal administrativo que puede operar con independencia sus programas. Así se garantizaba tanto el apoyo financiero necesario, como el desarrollo de los distintos programas formativos. Acá se incorporan programas hacia jóvenes y niños con discapacidades (“Coro de Manos Blancas” entre otros,), trabajo a nivel penitenciario, trabajo de luthería y el programa “Alma Llanera”, para el impulso de nuestra música tradicional.

En materia de infraestructura, se inauguró en 2011, el “Centro Nacional de Acción Social por la Música”, en el sector Quebrada Honda de Caracas, con salas de ensayo instrumental y práctica coral, una sala de concierto y teatro, sala de música de cámara y una concha acústica al aire libre. La Sala Simón Bolívar tiene capacidad para 880 asistentes, con un órgano tubular. Más la Sala Fedora Alemán para 338 personas, junto a un escenario tipo fosa, revestido de madera que permite el disfrute de recitales y conciertos de cámara de alta calidad.

Los datos del 2021, posiblemente ya superados, establecían la existencia de 443 Núcleos del “Sistema” a nivel nacional, 2.334 módulos distribuidos en parroquias, municipios y estados y unos 18 programas formativos a través de la música. Además la existencia de 1.772 agrupaciones de iniciación musical, 1.722 agrupaciones orquestales, 1.426 agrupaciones corales y 694 agrupaciones de Alma Llanera. Se contabilizan unos 1.012.777 de niños y adolescentes asimilados al “Sistema”.

Más allá de la existencia de un equipo especializado de relevo que se encuentra al frente del “Sistema” en la actualidad, es de resaltar por siempre la figura del maestro José Antonio Abreu como fundador y constructor de este exitoso proyecto. El maestro Abreu “cambió de paisaje” un 24 de marzo de 2018, a sus 81 años, dejando su ejemplo imperecedero en el impulso y desarrollo de esta obra majestuosa. Afortunadamente pudo en vida recibir muchos merecidos reconocimientos a su labor. En 1993 recibió el Premio Internacional de Música y Embajador de la Paz por UNESCO/ONU.

 

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En 2001, recibió el “Premio Right Liverlihhood Award” o Premio Nobel alternativo por el Parlamento sueco. Premio Internacional ONU y Embajador Nacional de la UNICEF (2004) y el Premio Príncipe de Asturias en 2008. En nuestro país, La Orden Francisco de Miranda en su primera clase (2007) y algunos otros reconocimientos. Más unos 15 doctorados Honoris Causa de distintas universidades nacionales e internacionales. Hay al menos unos 70 países que han asumido replicar la experiencia del “Sistema” venezolano en sus territorios.

Rescato unas declaraciones del consagrado internacionalmente maestro y director de orquesta venezolano Gustavo Dudamel, como hijo insigne de nuestro Sistema de Orquestas, publicadas por el diario “Correo del Orinoco” (07/04/2013, página 32), donde expresa que: “El Sistema no es una fábrica de músicos, es una escuela de ciudadanía”. Agrega que el sistema de orquestas de la tierra de Bolívar además de una evidente carga artística, tiene como principal motivación el rescate social de niños, niñas y jóvenes, que en su paso por este proyecto, desarrollan el sentido de pertenencia a un colectivo y a los valores humanos que ello implica, como el compañerismo y la solidaridad, entre otros.

¡LARGA VIDA AL “SISTEMA” EN SUS 49 AÑOS Y ÉXITOS POR SIEMPRE!

 

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José David Capielo Valles es ingeniero agrónomo y magíster en Desarrollo Rural, egresado de la Universidad Central de Venezuela (UCV), Campus Maracay. Nacido en Coro, estado Falcón, en 1949. Es docente jubilado de la Universidad Nacional Experimental Simón Rodríguez (UNESR), Núcleo Canoabo (2016). Es locutor, comunicador alternativo y colaborador de Ciudad Valencia desde 2014.

La Universidad Politécnica Territorial de Falcón “Alonso Gamero” (UPTAG) publicó digitalmente, en noviembre de 2023, su libro “Del Medanal Venimos. Un ensayo autobiográfico reflexivo”.

 

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