Continuaré en este escrito de hoy con esas recomendaciones que han pasado a la historia de la música afrocaribeña por tratarse de figuras reconocidas y muy queridas, bien sean músicos, cantantes, compositores, coristas, directores o arreglistas que lograron demostrar su talento gracias al oportuno apoyo de otras personas. Algunos casos, tal vez ya los he mencionado de manera aislada, sólo que ahora está todo el artículo dedicado a situaciones comunes.
Inicio con la ocasión en la que Willie Colón y Héctor Lavoe, cuando iban a grabar el álbum “Asalto Navideño” (1971), en el cual destacaron temas como “La murga”, “Canto a Borinquen” y ”Vive tu contento”, Willie quería algo diferente, una variante en el sonido, y para eso convocó a un amigo guitarrista para incorporar ese instrumento. Este amigo aceptó la invitación y, a su vez, invitó a otro amigo que tocaba el cuatro puertorriqueño muy bien en centros nocturnos y fiestas para que estuviera presente en los ensayos y se lo presentó a Willie y a Héctor, se trataba de Yomo Toro.
Le dieron la oportunidad a Yomo para que tocara y quedaron tan maravillados con lo que hizo y la manera de cómo adaptó el instrumento a la orquesta que no lo pensaron dos veces y lo incorporaron. El guitarrista, amigo de Willie y quien llevó a Yomo, libre de egoísmo, sabía que el indicado para ese trabajo era Yomo.
El cantante sonero y compositor nuevayorquino Henry Fiol aún no era conocido internacionalmente para finales de los años 70´s, pero en 1980 comenzó a trabajar con el apoyo y respaldo del experimentado sonero cubano Roberto Torres. Henry, en su condición de compositor, quería grabar sólo temas de su autoría, por otra parte, Roberto le recomendaba que grabara algunos sones cubanos con las adaptaciones pertinentes, pero Henry estaba reacio a la idea.
Aceptó la propuesta de Roberto y llegaron éxitos como “La juma de ayer” (1980), “Ahora me da pena” (1980) y, el mayor de todos sus éxitos, “Mala suerte” (1981). Como autoría de Henry pegaron los temas “Esta vida es un mango” y “Si cocinas como caminas” ambos de (1981). Esas sugerencias de su productor Roberto Torres pusieron a Henry en el mapa.
Uno de los mejores cantantes que ha dado la República Dominicana fue Santiago Cerón, para quienes no lo conozcan les recomiendo que ubiquen y escuchen el tema “Yambú”. Era bolerista con una tendencia y potencial para el canto lírico, vivía en Nueva York cuando en una ocasión lo escuchó el maestro, compositor y tresista cubano Arsenio Rodríguez, quien ya estaba radicado en esa ciudad. A Arsenio le gustó su estilo, lo saludó y le dijo que cantaba muy bien y que debería cantar Son, Santiago no se sentía capacitado para ello y con la sugerencia y apoyo del maestro se atrevió a hacerlo y demostró que Arsenio tenía razón; Cerón era un gran sonero y no lo sabía.
La combinación de la mejor dupla de la Salsa surgió de una recomendación. Ya se ha dicho hasta el cansancio que Willie Colón y Héctor Lavoe representaron la mejor combinación de la Salsa, sobre todo por lo popular y lo exitoso que fueron. La visión y el olfato los tuvo el músico dominicano Johnny Pacheco, como representante de la empresa Fania Record, quien había escuchado, por separado, a los dos adolescentes; a Willie con su orquesta y a Héctor en otro grupo. Los reunió, les expresó su parecer y ambos jóvenes aceptaron probar, a Héctor no le gustaba el grupo, pero, por complacer a Pacheco, decidió probar por corto tiempo, sin embargo, se fue amoldando, ¡y vaya resultado para la historia de la Salsa!
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Por la orquesta del percusionista Ray Barretto pasaron excelentes pianistas y arreglistas como fueron Gil López, Eddy Martínez y Oscar Hernández, entre otros, no obstante, uno de los más destacados fue Luis (Louie) Cruz, como pianista se destacó con Barretto, pero como arreglista, fue impresionante su producción con las mejores bandas y cantantes en calidad de solistas.
Cuando estaba por consolidarse la Típica ’73, el pianista era Sony Bravo, Luis andaba rondando por ahí, asistía a sus presentaciones, pero nunca tuvo la oportunidad. Ray Barretto necesitaba un pianista, pero no quería a otro que no fuera Sony Bravo, éste no aceptó la oferta por su compromiso con la Típica ’73, fue en ese marco donde el cantante Adalberto Santiago le presentó a Luis Cruz, Barretto aceptó la recomendación y le cayó de perlas.
Entre los temas arreglado por Luis Cruz con Barretto están: “Vive y vacila”, “Seguiré sin soñar”, “Te traigo mi Son”, “Flor de los lindos campos”, “Se traba”, “Que viva la música”, “La pelota”, “Cocinando”, “Bruca manigua”, entre otros.
Con otras orquestas, Luis Cruz destacó con “Señor sereno” con Ismael Miranda y Larry Harlow; “Gracia divina” con Larry Harlow; “Pueblo” con Willie Colón”; “Lluvia de tu cielo” con Willie Colón; “Kung Fu y Karate” con Ángel Canales; “Buscado guayaba”, “Dime” y “Ojos” con Willie Colón y Rubén Blades; “Los entierros” con Cheo Feliciano; “Ublabadú” con Héctor Lavoe y Fania All Stars y, para cerrar, “Juanito Alimaña” con Héctor Lavoe, entre muchos otros éxitos… Hasta aquí la lista por el momento.
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Ramón Emilio Toro Martínez (Caracas-Venezuela, 1966) es licenciado en Educación, mención Lengua y Literatura, de la Universidad de Carabobo (UC) en 1993. Es también Productor Nacional Independiente y locutor con experiencia en el desarrollo de programas radiales sobre música afrocaribeña en la ciudad de Valencia, estado Carabobo: Ciento por ciento Natural, por Lago 91.5 FM; Letras y Notas, por Salsera 96.3 FM, y Óyelo que te conviene, por RNV Región Central 90.5 FM. Es autor del libro «Letras y Notas sobre la Música del Caribe» (2020), presentado en la FILVEN Caracas 2020 (Casona Cultural Aquiles Nazoa) como el único proyecto editorial independiente de ese año.
Ciudad Valencia / Foto de RT: Edicson Dávila
