En la ciudad de Moscú, capital de Rusia, el Servicio Federal de Seguridad (FSB) desarticuló una célula conspirativa dedicada a la recogida de fondos para el movimiento terrorista Estado Islámico (EI), en conjunto la Guardia Nacional, el Comité de Investigación y el Servicio Federal de Monitoreo Financiero.

Las acciones se realizaron en la provincia de Moscú, el distrito autónomo de Janti-Mansisk, en la comarca de Krasnoyarsk y en la república caucásica de Daguestán.

En estas acciones, fueron detenidos seis rusos relacionados con otra agrupación desarticulada anteriormente con similares propósitos, con centro en Siria.

Agentes de seguridad requisaron medios de comunicación, y medios de pagos que demuestran el carácter delictivo de la actividad ejercida por los miembros de la referida célula conspirativa.

La suma recogida por los detenidos fue de 500 mil rublos (unos seis mil 770 dólares).

Entre 2016 y 2017, miembros del EI de origen ruso presentes en Siria recurrieron a un habitante de Daguestán, a quien encargaron la coordinación de la recogida de dinero en esa república rusa, en esta capital, la provincia de Moscú, Janti-Mansisk y en Krasnoyarsk.

Asi mismo, de acuerdo con el jefe del FSB Alexander Bortniakov, en la última década esa dependencia logró abortar 160 actos terroristas, incluidos 43 en 2019 y más de 20 en lo que va de año.

El pasado día 23, el Servicio Federal de Seguridad rusa eliminó a dos miembros del EI que ofrecieron resistencia armada cerca de la aldea de Troitskoe, en la región de Suzhensk, ubicada en la república rusa de Ingushetia.

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Además, el 11 de este mes el FSB impidió un ataque contra un edificio administrativo en la ciudad de Neftekamska, en la república de Bashkiria.

Una semana antes, fuerzas del orden público neutralizaron a un grupo extremista, tras otra operación en Ingushetia.

Ciudad VLC / AVN