“Tania García, voz de la esperanza” por Laura Antillano

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Tania García tiene una vida muy movida desde que los recitales de canto acompañan buena parte de los eventos que se suceden en Valencia, o viéndolo desde otra óptica, son los recitales musicales los que promueven la movilización pública cuando un acto de presencia activista está por llevarse a cabo con la voz de Tania García.

A Tania la conocemos desde tiempos inmemoriales, cuando habitábamos los pasillos de la Universidad de Carabobo, y esa circunstancia constituía para nosotros y otros la única realidad posible del día a día.

Pero la Tania con la que hoy nos encontramos es otra persona, ella ha elegido la música y con ello ha creado en su entorno la presencia de un público de diversas generaciones que la ve y escucha  con un cariño, de simpatía “a  flor de piel¨”

Tania se ha convertido en la voz que canta en los conciertos más populares de esta Valencia carabobeña, y su carisma se extiende por todas partes, despertando la admiración y el cariño de los valencianos.

 

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Hoy tenemos la oportunidad de conversar con ella y compartir ideas sobre  sus empeños musicales y el carácter de su cercanía afable y sentimental con un público que la quiere y acompaña con el mejor de los afectos.

Tania García nació el 14 de julio de 1950, en tiempos de los inicios de la dictadura de Marcos Pérez Jiménez en nuestro país.

Nos cuenta que vino al mundo en un parto de morochos con su hermano Alexey, y que ese nacimiento se produjo en Cabimas, estado Zulia:

Tuve  siete hermanos, dos están fallecidos. Soy morocha, de Alexey. Somos de Cabimas, mi hermano morocho murió hace dos años. Crecí en Punto Fijo, porque mi abuelo Rafael, que era como mi papá, era militante comunista y lo botaron de su trabajo. Me crie, pues, con esos abuelos, Catalina y Rafael, ellos se quedaron con los morochos, que éramos Alexei Fiodor y yo, porque además mi madre se casó y formó como otra familia.

 

Tania García-Laura Antillano-La Palmera Luminosa

 

¿Entonces creciste separada de tu mamá biológica?

Solo después de adulta tuve una relación más estrecha con mi mamá, María Concepción, ella tuvo otros hijos con su segundo marido.

Yo me caso en casa de mi abuelo materno. La relación con mis abuelos era como la que se tiene con los padres. Tenía dos tíos: Amador y Melecio. Ellos llevaban el sustento, trabajando con la Shell, pero a Amador lo botaron por comunista. Por eso en esa casa conocimos, siendo nosotros niños, a varios dirigentes, por allí pasaban Manuel Taborda, Jesús Farías, Argelia Laya (ella cuando ya yo era mujer), Olga Luzardo, Alcides Hurtado, mucha gente pasaba por allí, nuestra casa era como un “punto” para pasar a comer, en la clandestinidad.

De hecho, yo a los 8 años comencé la militancia siendo pionera del partido comunista hasta el 70, 71, cuando se funda el partido MAS.

Yo llegué a Valencia con José, mi primer hijo, de 11 meses de nacido, casada con José Rugeles, quien se vino antes que yo. A él lo botaron también por comunista, no le daban más trabajo y se vino a Carabobo, él había estado preso en Curimagua, por lo político. Cuando lo soltaron se vino a Valencia.

Aquí montamos la casa familiar y nacieron Endrina, Gamal Ernesto, Indira Sinaí y Jacobo Salvador. Jacobo y yo fuimos trabajadores empleados de la Universidad de Carabobo.

 

Tania García-Laura Antillano-La Palmera Luminosa

¿Cuándo comenzaste a cantar?

Desde niña, en las actividades escolares y otros actos, me ponía a cantar mi tío Amador. Él me guiaba, y yo participaba en actos escolares y en la casa.

Lo de la casa era un elemento más, cuando mi tío me ponía a recitar y cantar, mi tío tocaba cuatro y me acompañaba: “Dele así, dele asao”.

Me enseñó poemas de Andrés Eloy Blanco, sobre todo, y  también de los españoles Antonio Machado y Federico García Lorca. Por allí me inicié en estos menesteres.

 

¿Cuántos hijos tuviste?

Séis: José Rafael, Gamal Ernesto, Indira Sinaí, Endrina Katzalyn (nombre vasco), Jacobo Salvador y Carlos Esteban. Unos amigos vascos, que tenían una pastelería en La Alegría, me dieron esa idea del nombre Katzalyn.

 

¿Cuándo comenzaste con la música en términos profesionales?

Aquí en Valencia, desde la Universidad, en casas de amigos y en algunos eventos de organismos del estado.

Fui coordinadora de la Cátedra de Música Popular Latinoamericana Alfredo Sadel, de la Universidad de Carabobo, después de fallecido el profesor José Francisco García Marcano, de 1998 al 2001.

Fui fundadora del Coro Estable del Teatro Municipal de Valencia, del 1987 a 1995. Sigo siendo presidenta de la Fundación Boleros del Mar, de Carabobo.

 

Y tienes un músico que te acompaña. ¿Cómo lo conociste y quién es?

Ricardo Matute, guitarrista, me acompaña en todos los eventos. Ensayamos periódicamente, así vamos ampliando el repertorio, Lo conocí en el MUVA, hace cuatro años, fue trabajador de la Universidad de Carabobo, ahora jubilado. Tiene más de treinta años conociendo su instrumento, y hacemos buen dúo, es comprensivo y nos acoplamos técnicamente.

 

¿Cómo escoges tu repertorio?

Lo escogía inicialmente en base al género del bolero, porque era lo que los amigos más pedían. En general es: Música popular latinoamericana, canciones revolucionarias, los himnos, la música o repertorio de Joan Manuel Serrat, de Mercedes Sosa, de Manuel Heredia, María Elena Walsh, de Simón Díaz, Pablo Milanés, Silvio Rodríguez.

 

En los conciertos, ¿qué te pide más el público?

Depende del evento. Si es algo en relación a la Historia, por ejemplo, a Bolívar y a Manuela, solicitan canciones latinoamericanas relacionadas a los personajes. Los boleros en las veladas románticas, en las reuniones personales, cercanas, agasajos de amigos, tiene que ver con el evento.

 

Últimamente  estás presente en muchos eventos, ¿a qué se debe?

A que me conocen más y les gusta como interpreto. Mañana [el pasado Día de la Mujer] canto en PDVSA GAS, un conversatorio dedicado a las Mujeres, para las trabajadoras de PDVSA Gas en La Quizanda.

 

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Adapto el repertorio al público Latinoamericano, de Silvio RodrÍguez, de Pablo Milanés, María Elena Walsh, pero puedo incluir los boleros, a la mayoría le gusta también la música romántica, sobre todo a la gente de nuestra generación.

 

Tania García-Laura Antillano-La Palmera Luminosa

 

¿Con que periodicidad tienes conciertos?

Depende de las actividades programadas por entes culturales o políticos. Este mes de marzo hay múltiples, porque se celebra el Día de Valencia. El 21 de marzo inclusive canto en la Plaza La Candelaria, en una velada romántica dedicada a adultos mayores. Allí me invito Fundatur. Antes, el 18, hay una Velada Romántica en la Plaza de Lomas del Este, patrocinada por la Alcaldía de Valencia y los Consejos Comunales de la Parroquia San José.

 

¿Qué sensación te produce el encuentro con el público?

Me satisface porque siento que les agrada el repertorio, por su respuesta inmediata, cálida, que demuestra que hay química, empatía, y eso produce una satisfacción que te hace convencerte de que hay una conexión particular con todos.

 

¿Qué autores venezolanos están  en tu repertorio?

Chelique Sarabia,  Aldemaro Romero,  Simón Díaz, Otilio Galíndez… y otros.

 

¿Cuáles son las canciones más solicitadas? ¿Depende del tipo de público?

En boleros: “Una mujer”, “Regálame esta noche”, “Cómo fue”, “Solamente una vez”; en género Canción Latinoamericana: “La cigarra”, de María Elena Walsh, “Canción con todos” de Mercedes Sosa, “Dale tu mano al indio” de Daniel Viglietti; temas de Víctor Jara: “Plegarias de un labrador, Te recuerdo Amanda, El derecho de vivir en paz”, entre otros. Y temas de Alí Primera: “No basta rezar, Cunaviche adentro, Humanidad, Mamá Pancha”…

 

¿Cuáles te pide más el público?

Depende del público presente en el evento, si es romántico querrán un bolero, si es un evento político serán canciones latinoamericanas “contestatarias”.

 

¿Te satisface lo que haces?

Plenamente, sobre todo cuando yo misma siento que el público está en comunicación conmigo, y eso te dice que el objetivo se cumplió. La “química” que se produce.

 

Tania García-Laura Antillano-La Palmera Luminosa

 

¿Alguno de tus hijos se dedicó a la música?

Sí, Gamal Ernesto, estudió canto y profesionalmente fue productor musical, estudio en la Universidad Central de Venezuela la licenciatura en Arte, mención Promoción Cultural. Tomaba con mucha seriedad su trabajo.

 

¿Cuando es tu próximo concierto para el público abierto?

Será el 25 de marzo, Día de Valencia, en la Plaza Candelaria, están todos invitados.

 

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Gracias Tania, por tu canto, por tu solidaria participación en la vida de todo el que te escucha y te conoce.

 

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Laura Mercedes Antillano Armas (Caracas, Venezuela, 8 de agosto de 1950) es una escritora venezolana, que ha incursionado en los géneros de ensayo, poesía, cuento, novela y crítica literaria. También ha trabajado como titiritera, guionista de radio y televisión y promotora cultural.

Es licenciada en Letras Hispanoamericanas y Magister en Literatura Venezolana por la Universidad del Zulia (LUZ). Durante 25 años ejerció como profesora de Literatura en el pre-grado de la Facultad de Educación de la Universidad de Carabobo (UC). También coordinó el Postgrado en Literatura Venezolana de la UC (1995-1998), además de ejercer también como Directora de Cultura de la misma universidad (1999).

Es ganadora del Premio Nacional Cultura, mención Literatura, 2012-2014,​ Premio Bienal José Rafael Pocaterra mención Poesía con la obra “Migajas” (2004), Ascesis al Premio Miguel Otero Silva de la editorial Planeta de Venezuela con su novela “Solitaria solidaria” (1990), Premio de Cuento del diario El Nacional con su cuento “La luna no es de pan de horno” (1977), Premio Julio Garmendia de la Universidad Central de Venezuela (UCV) con el cuento “Caballero de Bizancio” (1975).

Entre su vasta obra publicada se incluyen, entre otros: La bella época (cuentos, 1969), La muerte del Monstruo Come Piedra (novela, 1971 y 1997), Un carro largo se llama tren (cuentos, 1975), Haticos Casa Nº 20 (cuentos, 1975), Los niños y la literatura (estudio, 1978), Maracaibo: Las paredes del sueño (textos, con fotografías de Julio Vengoechea, 1981), Perfume de gardenia (novela, 1982, 1984 y 1996), Dime si adentro de ti no oyes tu corazón partir (cuentos, 1983 y 1992), Cuentos de película (cuentos, 1985 y 1997), Literatura infantil e ideología (estudio, 1987), La luna no es pan de horno (cuentos, 1988), Solitaria Solidaria (novela, 1990 y 2001), ¿Cenan los tigres la noche de Navidad? (cuento infantil, 1990 y 2005), ¡Ay! Que aburrido es leer: El hábito lector y el cuento de la infancia (estudio, 1991), Jacobo ahora no se aburre (cuento infantil, ilustrado por Tony Boza, 1991), Tuna de mar (cuentos, 1991), Diana en la tierra wayúu (novela infantil, 1992), Una vaca querida (literatura infantil, 1996), Apuntes sobre literatura para niños y jóvenes (estudio, 1997), Las aguas tenían reflejos de plata (novela, 2002), Elogio a la comunidad (texto divulgativo, 2004), Poesía completa 1968-2005 (poesía, 2005), Emilio en busca del enmascarado de plata (novela para niños, 2005), La luna no es pan de horno y otros cuentos (antología de cuentos, 2005), La aventura de leer (estrategias de lectura, 2005), Libro de amigo (poesía, 2007), Crónicas de una mirada conmovida (crónicas periodísticas, 2011), Ellas (Semblanzas, artículos, entrevistas, 2013), Las alas de la lectura (estrategias de lectura, 2019), Me haré de aire (cuentos, 2021).

 

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