Las autoridades de Mineápolis, Estados Unidos (EEUU) anunció que pagará un total de 27 millones de dólares a la familia del afrodescendiente George Floyd, para resolver una demanda presentada por esta, tras el asesinato de Floyd en mayo.

La indemnización fue aprobada por unanimidad por el ayuntamiento de Minéapolis, que añadió en el último minuto en la agenda de su reunión regular, que se desarrolló a puerta cerrada.

“Ninguna cantidad de dinero puede compensar el intenso dolor o el trauma causado por esta muerte a la familia de George Floyd o a la gente de nuestra ciudad”, afirmó la presidenta del concejo, Lisa Bender, citado por la agencia EFE.

 

Floyd fue asesinado el pasado 25 de mayo por la policía Derek Chauvin, quien colocó su rodilla sobre el cuello del ciudadano durante al menos ocho minutos, a pesar de que el individuo se quejaba de que no podía respirar.

“El acuerdo es un paso necesario para que todos nosotros podamos empezar a pasar página”, ha dicho Rodney Floyd, uno de los hermanos del fallecido.

“El legado de George, para aquellos que le queríamos, siempre será su espíritu de optimismo sobre que las cosas pueden ir a mejor, y esperamos que este acuerdo haga justo eso: que haga que las cosas sean un poco mejores en Minneapolis y mantenga una luz para comunidades por todo el país”.

 

familia de George Floyd
La familia de George Floyd agradece a la población por el apoyo recibido

 

Los 27 millones de dólares, cuantía aprobada por unanimidad en el pleno municipal, incluyen 500.000 que irán al vecindario en el que Floyd fue detenido la tarde del 25 de mayo del año pasado.

Floyd, de 46 años, compró un paquete de tabaco en una tienda cercana, y un dependiente del establecimiento le acusó de pagar con un billete falso de 20 dólares.

Después de que se negara a devolver los cigarrillos, el trabajador llamó a la policía.

Los agentes llegaron y esposaron a Floyd, pero cuando trataron de meterlo en el coche patrulla, este se resistió. Se produjo un forcejeo que acabó con el detenido en el suelo.

El agente Derek Chauvin, de 44 años, colocó su rodilla en el cuello de Floyd y la mantuvo ahí, presionando, durante más de ocho minutos. Numerosos viandantes, al percatarse de que el detenido estaba sufriendo, le pedían al agente que dejara de presionar su cuello.

 

 

Algunos testigos grabaron la escena con las cámaras de sus móviles. Otros dos agentes ayudaron a Chauvin y uno más evitaba que intervinieran los testigos. Floyd dijo en más de 20 ocasiones que no podía respirar.

Los vídeos, que se difundieron rápidamente y acabaron dando la vuelta al mundo, muestran cómo se queda sin fuerzas y los agentes se lo llevan.

El fallecimiento de Floyd, que se constató una hora más tarde en el hospital, detonó la mayor movilización por la justicia racial en Estados Unidos al menos desde los años sesenta

 

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Ciudad VLC / AVN / Agencias