El poeta Alberto Arvelo Torrealba fue un intelectual venezolano cuya poesía dio identidad al llanero del país suramericano al retratar con textos su tradición e idiosincrasia.
A 116 años de su natalicio, se le reconoce su labor educativa, tras graduarse de los liceos en Barquisimeto y Caracas, además de su carrera política como gobernador de Barinas, como consejero de la embajada de Francia, embajador venezolano en Bolivia e Italia, entre otros cargos.
Sin embargo, no cabe dudas que su obra poética resaltó entre sus otros talentos. Se caracterizaba por ser intimista, contar con paisajes y costumbres llenas de lirismo y sensibilidad, tanto que por sus temáticas se le encuadró en el criollismo y el naturalismo con el poeta Francisco Lazo Martí.
#28deMarzo de 1971 muere el Poeta del llano Venezolano "Alberto Arévalo Torrealba". Fue Embajador de Italia y Bolivia. Dejó para las futuras generaciones el canto de Florentino y el diablo. @NicolasMaduro @luchaalmada @Mippcivzla @MervinMaldonad0 @YhoannaLinarez @AdolfoP_Oficial pic.twitter.com/QdHL70ULV9
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Para recordar su aniversario de nacimiento en 1905 te compartimos cinco obras que te permitirán recordar al poeta Alberto Arvelo Torrealba:
Música de Cuatro
Esta obra fue su primer poemario, publicado en 1928.
Cantas
Esta fue otra de sus grandes obras, publicada en 1932.
Florentino y el diablo
Escrita en 1940, esta conocida obra sirvió de inspiración para el musical La Cantata Criolla, presentada en 1954 por Antonio Estévez. Es un clásico relato del conflicto entre el bien y el mal, la vida y la muerte, con varios íconos del llano colombovenezolano. Es una exaltación de esa cultura llanera.
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Florentino era el mejor coplero y jinete. Mientras cabalgaba a una fiesta, se percató de que alguien lo seguía y cuando arribó a la fiesta, el hombre lo retó a un contrapunteo.
Florentino se dio cuanta al comenzar el contrapunteo que el hombre era el diablo y que, si perdía el reto, tendría que darle su alma.
Tras varias horas, ninguno perdía y Florentino estaba muy cansado. Sin embargo, al salir el sol logró vencer al diablo, pues en su último verso mencionó a las Tres Divinas o Tres personas divinas (el padre, el hijo y el espíritu santo).
Lazo Martí, Vigencia en lejanía
Esta obra se publicó en 1966 y por ella fue merecedor del Premio Nacional de Literatura. Consistía en un ensayo crítico literario sobre el médico y poeta venezolano Francisco Lazo Martí, conocido como el máximo exponente del nativismo criollo.
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Por aquí pasó
Finalmente, Por aquí pasó, este poema está dedicado al libertador Simón Bolivar, evocando sus batallas. Un fragmento del poema dice así.
«Por aquí pasó compadre
hacia aquellos montes lejos
por aquí vestido de humo
mi General iba ardiendo…»
Ciudad VLC / Telesur
