Este miércoles fue confirmado el espionaje al fundador de WikiLeaks, Julian Assange, en la embajada ecuatoriana en Londres, revelaron dos empleados de una empresa de seguridad española.
Estos aseguran que la información recabada fue entregada a los servicios de inteligencia estadounidense.
La denuncia tuvo lugar en el tribunal británico que evidenció la extradición a Estados Unidos del fundador de WikiLeaks, a quien el Departamento de Justicia norteamericano quiere juzgar por publicar información clasificada del Ejército y la diplomacia de ese país.
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Según uno de los testigos, la empresa obtuvo el contrato de seguridad en 2015, pero el espionaje comenzó después que Morales viajó a Las Vegas en julio de 2016 para asistir a una feria comercial.
Allí firmó un contrato con otra compañía propiedad del magnate Sheldom Addison, conocido por su cercanía al presidente Donald Trump, reseñó Prensa Latina.
El testigo dos alegó, por su parte, que después que Trump ganó las elecciones presidenciales de noviembre de 2016, el espionaje y la recolección de información sobre Assange se intensificó, ya que Morales se obsesionó con obtener la mayor cantidad posible de datos para pasarlos a los norteamericanos.
El juicio de extradición del fundador de WikiLeaks, que se reanudó el 7 de septiembre pasado después de más de seis meses de demora por la pandemia de Covid-19, debe concluir esta semana en Londres, pero la justicia británica no emitirá su veredicto hasta después de las elecciones presidenciales de noviembre próximo en Estados Unidos, o el año próximo.
Toda vez que Assange seguirá en la prisión de máxima seguridad londinense donde fue confinado desde que el gobierno de Ecuador lo entregó a las autoridades británicas el 11 de abril de 2019.
Ciudad VLC/AVN
