Un 25 de noviembre de 1965 fue inaugurada nuestra urbanización: La Isabelica.
Previamente fue una finca, cuyo nombre era «La Isabela», la actividad agrícola y ganadera era su principal característica.
Fue planificada en un principio para ser construida en «Los Guayos», por esto hubo polémica entre el Ministerio de Obras Públicas y el Banco Obrero; el primero decide hacerla en la zona sur, aquí, en estos terrenos de ciento noventa hectáreas aproximadamente se dirigió el pensamiento urbanístico en pro de todos los trabajadores de la zona industrial, cubriendo de esta manera la necesidad básica de vivienda, y lo más importante, una victoria del proletariado.
Originalmente los sectores se iban llamar UD (unidades de desarrollo), hoy en día contamos trece sectores, noventa y tres edificios, dos islas laterales residenciales y una isla central deportiva, cultural, y comercial.
Históricamente ha sido catalogada como una ciudad modelo, donde han surgido numerosos deportistas, maestros, políticos, cantantes, artistas, escritores, investigadores y un gran número de ciudadanos honorables, honrados, cuyos esfuerzos en sus respectivas áreas han sumado para el desarrollo de La Isabelica.
En 2013, y luego en el 2017, aquí, en La Isabelica, vivimos tiempos de convulsiones generalizadas, guarimbas por doquier, caos y destrucción, nada de esto es típico del isabeliquense, fueron días en donde la zozobra se apoderó de los habitantes, personas confundidas, otras consternadas y unas cuantas más vinieron desde otros sitios a dañar nuestros patrimonios, a privarnos de vivir cívica y ciudadanamente como siempre había sido nuestra existencia.
Gracias a la llegada del gobernador Rafael Lacava, La Isabelica comenzó a ser atendida integralmente, incorporada a las políticas públicas gratuitas y de acceso universal, tales como el CLAP, el gas de cilindros, el gas directo, la cultura, la educación, la producción comunitaria, la mejora en los servicios públicos, y lo más importante, la inclusión con eficiencia para que las divergencias sean acordadas en paz y en sano beneficio para todos los habitantes, sin excepción.
El futuro se vislumbra positivamente con un gran potencial a desarrollar totalmente, con obras en plena ejecución a corto, mediano, y largo plazo, tal como el gas directo, nuestro porvenir lo tenemos garantizado con el sudor de nuestra frente y con un gobierno municipal, estadal, y nacional que conciba a nuestra población sin prejuicios, que seamos atendidos, comprendidos, y sobre todo amados eternamente.
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¡Con cariño y afectos para uno de mis amores eternos: La Isabelica!
Escribo estas líneas hoy, en el marco del 55mo aniversario, también celebrando el Día del Músico, y el Día Nacional del Psicólogo.
Juan Carlos Guerrero Ardila / Ciudad VLC
