El ministro de Relaciones Exteriores de Venezuela, Jorge Arreaza, denunció este jueves que EEUU pretende impugnar las credenciales de la delegación venezolana ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
El canciller señaló que la medida tiene prevista ser aplicada este viernes, cuando la vicepresidenta de Venezuela, Delcy Rodríguez, tiene agendada su participación en el debate de la 74° Asamblea General de la ONU.
De acuerdo a Arreaza, quien hizo la denuncia durante la reunión ministerial del Movimiento de Países No Alineados (MNOAL) en Nueva York, al margen de la Asamblea de la ONU, esta acción «vulnera flagrantemente la Carta de las Naciones Unidas, las normas del derecho internacional e incluso sentencias de la Corte Internacional de Justicia».
El canciller señaló que esta acción es parte de las medidas que ha adoptado EEUU durante 2019 contra Venezuela, nación que, junto a un «grupo minoritario de gobiernos», según Arreaza, pretende instrumentalizar la ONU como un arma de intervención en asuntos que son esencialmente de la jurisdicción interna del país suramericano.
Arreaza denuncia que están suspendidos los permisos
Este miércoles, la Casa Blanca publicó decretos, firmados por el presidente Donald Trump, sobre la suspensión de permisos de ingreso a EEUU de altos funcionarios de Venezuela, así como a sus familiares.
Según el documento, la medida afecta a los «miembros del régimen de Nicolás Maduro«, los militares y policías, miembros de la Asamblea Nacional Constituyente y sus familiares.
La medida aclara que «esta suspensión no está destinada a aplicarse a los que cesen estas acciones [del régimen de Maduro] y den pasos concretos para ayudar a Venezuela a volver [a ser] un país democrático».
La propuesta de Rusia
Rusia también resultó afectada por una medida similar, luego que EEUU negara el visado a varios funcionarios de esa nación, que tenían previsto participar en la Asamblea General de la ONU.
Ante ello, el canciller ruso, Serguéi Lavrov, sugirió que ha llegado el momento de plantear la cuestión de trasladar la sede de las Naciones Unidas a otra parte del mundo, concretamente a la ciudad rusa de Sochi.
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El ministro señaló que esta actitud de Washington se basa en la llamada «exclusividad de EEUU«, aunque lamentó que ello derive en medidas que no corresponden al derecho y las prácticas internacionales».
«Creen que pueden hacer lo que les dé la gana, mientras el resto debería hacer solo lo que ellos les permiten».
Ciudad VLC / Actualidad RT
