La crisis humanitaria que atraviesan los pueblos ancestrales del país suramericano ante el aumento de los asesinatos, estigmatización, amenazas y confinamientos permanentes en sus propios territorios, fue denunciada este miércoles por la Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC).
Ante esta situación la ONIC solicitó la protección para las comunidades indígenas de todo el país.
En conferencia de prensa, representantes de la ONIC confirmaron que en las últimas horas fueron asesinados seis indígenas en los departamentos de Nariño, Cauca y Chocó.
Desde la organización indígena señalaron que al menos 43 líderes indígenas han sido asesinados durante el 2021, es decir, que cada mes entre cuatro y cinco líderes indígenas fueron eliminados.
«De esta manera, estamos viviendo un genocidio, una tragedia por la crisis humanitaria para los pueblos ancestrales».
«… esto sucede especialmente para los 70 pueblos que se encuentran en vía de extinción física y cultural de los 115 existentes en nuestro país», enfatizaron los representantes de la ONIC.
Pueblos y Naciones Indígenas de Colombia exigen al gobierno de @IvanDuque y a los grupos armados detener de manera inmediata el etnocidio físico, espiritual y territorial al que están siendo sometidos #SOSPueblosEnPeligro pic.twitter.com/sbuNrYmAzj
— Documental Amarillo (@documentalamari) September 22, 2021
Ante la crisis humanitaria la ONIC solicita detener el etnocidio
La ONIC junto a otras organizaciones ancestrales exigieron al Gobierno colombiano y a los grupos armados en los territorios (legales o ilegales), detener de manera inmediata el etnocidio físico y cultural en contra de los pueblos y naciones indígenas para frenar la crisis humanitaria.
Advirtieron que en Colombia la guerra continúa y está desangrando las comunidades originarias por defender la vida, la paz y los derechos.
La organización indígena le entregó a la Justicia Especial para la Paz (JEP) y a la Comisión de la Verdad un informe en donde detalla más de 3.000 homicidios en el marco del conflicto armado y denunciaron que desde la firma del acuerdo de paz, en el año 2016, la violencia contra las comunidades se habría intensificado, dejando ya 213 personas asesinadas.
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Ciudad VLC/VTV
