Deportivo Lara regresa este jueves a la Copa Libertadores con la ilusión de completar el círculo que no pudo cerrar en su pasada comparecencia al evento. El año pasado el cuadro rojinegro tuvo una actuación honrosa que incluyó triunfos inéditos sobre Independiente de Argentina y Millonarios de Colombia, y esta vez su mira está puesta en avanzar de la fase de grupos.
El subcampeón del fútbol nacional debuta ante Emelec de Ecuador en el estadio Metropolitano de Cabudare, donde jugará a puerta cerrada por cumplir una sanción de la Conmebol por hechos de violencia de los aficionados rojinegros.
La fortaleza de Lara ha sido su orden defensivo
El equipo sabe ralentizar el juego, desespera al rival que termina cometiendo errores. Así fue que los dirigidos por Leonardo González vencieron el año pasado a 1-0 a Independiente y 2-1 a Millonarios en su estadio de Cabudare, y llegaron hasta la final por el campeonato absoluto del fútbol nacional perdida ante Zamora.
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“Todos los rivales en la Copa Libertadores son complicados. Si queremos avanzar, tenemos que sumar en casa y proponer y arriesgar más de visitante”, analizó el técnico de Lara, Leo González, las obligaciones que debe cumplir su equipo para superar la fase de grupos.
Para fortalecer la zona de definición, el cuadro crepuscular se reforzó con la experiencia del delantero argentino Gonzalo Di Renzo, quien ya sacudió las redes en el triunfo 3-0 sobre el Deportivo Anzoátegui.
El Emelec ecuatoriano ha tenido un comienzo irregular en el campeonato de su país, donde marcha noveno en la tabla. Practica un fútbol de ataques veloces para aprovechar la potencia de Gabriel Cortez y Bryan Angulo.
El trabajo defensivo de Lara para evitar las transiciones rápidas de los eléctricos será vital, si quiere controlar el juego.
Ciudad VLC / con información de Líder
