La ansiedad de sentir que nos estamos perdiendo de un montón de cosas que otros sí están viviendo, se le denomina Fomo Sexual.
Es la angustia de sentir que hay todo un mundo de experiencias que no conocemos y que no sabemos si algún día podremos experimentar.
Haciendo foco en lo sexual, el fomo en este caso es no querer perderse de todas las experiencias sexuales que uno podría tener, pero que en el marco de pareja estable (y monógama) se tiende a creer que uno se lo va a perder.
La mayoría de las personas que lo padecen son hombres y mujeres entre 25 y 50 años que temen no haber vivido suficiente experiencia sexual, y que al momento de formalizar una relación de pareja piensan que afuera de sus habitaciones pasan cosas mucho más interesantes que en la propia.
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Un síntoma del FOMO sexual es la alegría que nos puede dar ver que un ex le dio like a una foto que subimos a redes sociales, o que ve nuestras storys de instagram, o la envidia que genera ver que otros cuentan con apps para tener citas casuales con desconocidos.
Ciudad Valencia / Metro951
