Como la de Pablo Escobar”, así catalogaron la casa y vida del policía de España, Óscar Sánchez Gil, detenido recientemente junto a su esposa, en la ciudad de Alcalá de Henares, con 20 millones de euros ocultos en paredes del sótano de su vivienda.

El dinero es proveniente de pagos que le realizaban narcos para poder ingresar cargamentos de drogas a la nación europea.

 

Según fuentes de la Policía Nacional de España, consultadas por El Mundo y El Debate, expresaron que la cantidad de dinero y las sofisticadas medidas de seguridad empleadas para ocultarlo han llevado a comparar este caso con el del célebre capo colombiano Pablo Escobar.

“Nunca un policía había ganado tanto dinero pervirtiendo el uso de su uniforme y de su placa”, declararon los informantes.

La Unidad de Asuntos Internos de la Policía Nacional, ingresó a la casa de Sánchez Gil, buscó el dinero en la cocina, comedor, habitaciones, área de la piscina y bar de la casa. Finalmente, “los agentes realizaron un hallazgo impactante en compartimientos ocultos dentro de las paredes de su casa”, donde hallaron los 20 millones de euros.

 

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Cinco años de corrupción 

Las investigaciones preliminares revelan que Sánchez Gil colaboró durante al menos cinco años con una poderosa organización criminal dedicada al tráfico de drogas de Ecuador. El policía utilizaba sus conocimientos y contactos en la Policía Nacional de España para facilitar la entrada de cocaína en el país, burlando los controles policiales.

“Su participación en esta red internacional de narcotráfico es considerable”, señalaron fuentes cercanas a la operación. Aunque no se le considera el líder de la organización, su posición dentro de la misma era clave para garantizar el éxito de las operaciones.

 

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Ciudad Valencia / VN