La escritora de Corea del Sur Han Kang, de 53 años, se constituye en la primera mujer de su país en recibir el Premio Nobel de Literatura para este año 2024.
El único surcoreano en ganar un Nobel, hasta ahora, había sido el expresidente (de 1998 a 2003) Kim Dae-jung, quien recibió el Premio Nobel de la Paz en el 2000, cuando fue galardonado por «su trabajo por la paz y la reconciliación con Corea del Norte».
La academia sueca destacó a Han Kang por su intensa prosa poética que “confronta traumas históricos y expone la fragilidad de la vida humana».
De acuerdo con el comité del Nobel, la obra de Han Kang tiene una conciencia única de las conexiones entre el cuerpo y el alma, los vivos y los muertos, y se ha convertido en una innovadora de la prosa contemporánea.
Han, quien vive en Seúl, se convierte así en la mujer número 18 en recibir el Nobel de Literatura.
De Kang se conocen principalmente en español con La vegetariana (con la que se dio a conocer en Occidente y la hizo acreedora del Man Booker internacional de ficción, en 2016, por su traducción al inglés) y La clase de griego.
La vegetariana está escrita en tres partes y retrata las violentas consecuencias que se producen cuando su protagonista Yeong-hye se niega a someterse a las normas de la ingesta de alimentos:
“Su decisión de no comer carne se enfrenta a diversas reacciones completamente diferentes. Su comportamiento es rechazado a la fuerza tanto por su marido como por su autoritario padre, y su cuñado, un artista de vídeo que se obsesiona con su cuerpo pasivo, la explota erótica y estéticamente. Finalmente, es internada en una clínica psiquiátrica, donde su hermana intenta rescatarla y devolverla a una vida ‘normal’. Sin embargo, Yeong-hye se hunde cada vez más en un estado parecido a la psicosis, expresado a través de los ‘árboles en llamas’, un símbolo de un reino vegetal tan atractivo como peligroso”, dice la reseña y en la Academia Sueca destacaron que “el libro, que trata tanto de la amistad más profunda como del dolor heredado, se mueve con gran originalidad entre las imágenes de pesadilla del sueño y la inclinación de la literatura de testigos a decir la verdad”.
La clase de griego (2023), por su parte, cuenta la historia de otra mujer, una madre divorciada que “no es joven ni especialmente atractiva”, que de un momento a otro deja de hablar y luego “se mueve y lo comprende todo sin acudir a la lengua”.
En suma, se trata de un profesor ciego que le habla a una alumna muda mientras él busca a su madre y ella a su hijo. Y como detalle resaltante, de cara a la literatura que se hace en lengua castellana y que tiene como uno de sus máximos referentes al escritor argentino Jorge Luis Borges, La clase de griego comienza y termina con menciones a ese gigante de la literatura mundial a quien nunca concedieron el Nobel.
Sin embargo, tras el anuncio del Nobel, la propia Han Kang ha recomendado a quienes recién saben de su existencia que busquen como introducción a su obra la novela de base histórica Decir adiós es imposible, donde se dice que ella indaga en el trauma dejado por la llamada masacre de la isla de Jeju; lugar en que una rebelión contra la autoridad, en 1948, fue reprimida por el Ejército, causando la muerte de unas 30 mil personas.
Ciudad Valencia / Agencias