Si las elecciones de hoy fueran en cualquier país de África, Asia o NuestraAmérica, los autodefinidos “adalides de la libertad” ya hubieran dicho que esto es un fraude, que las irregularidades saltan a la vista y que la incertidumbre empañará el resultado.
Se darían declaraciones desde el Departamento de Estado desconociendo al ganador, sobre todo si este es un candidato no afín a sus intereses, y finalmente exhortarían a otros gobiernos del mundo a que denunciaran las miles de irregularidades que vician tales elecciones.
Pero estas elecciones son en los Estados Unidos (EEUU-USA).
Veamos: Ya lo hemos dicho, en el gran país del norte no gana “el que gana”. La presidencia la va a obtener quien saque 270 votos electorales, es decir, usted puede obtener el favor de la mayoría de electores, pero si gana en los estados con más votos electorales, usted se sentará en la Oficina Oval, “aun perdiendo la voluntad popular”.
En otro país, esto sería una burla a la decisión del pueblo.
Votantes por correo
Por otra parte, en los Estados Unidos de América se permite votar por correo. En este proceso de 2020, el voto emitido de esta forma es de una cifra record y el escrutinio del mismo ya ha comenzado, no hay garantías de que ese voto haya sido emitido por el verdadero remitente (por ejemplo, si en mi casa se emiten cinco votos por correo y existe desinterés de alguno de los otros votantes, yo mismo puedo emitir ese voto para mi candidato favorito).
De hecho, muchas personas pueden enviar su voto el día de hoy y quién sabe cuándo se va a contar. Este escrutinio por correo no se hace inmediatamente, por lo que el resultado se conoce a los días, creando incertidumbre en la sociedad (ya esto parece un informe manipulado de la OEA).
Florida, la joya de la corona
Uno de los estados más disputados y con mayor número de votos electorales, es decir, con gran poder de elegir, es Florida, que se ha caracterizado por ser un estado “péndulo”, o sea, aquél en el que sus electores se inclinan por uno u otro partido por mínimos porcentajes.
Pero éste es también uno de los estados con mayor restricción a la hora de permitir el voto, siendo las comunidades afroamericanas, latinas y pobres las más afectadas, especialmente la primera de ellas, la cual es de tendencia mayoritariamente demócrata.
Limitar el derecho al voto es una expresión de un sistema y régimen atroz que atenta contra los principios democráticos (ya me parece que está hablando Almagro)…
Presiones de grupos extremistas y día laboral para elecciones
Además, en algunas regiones se espera que grupos que apoyan el libre uso de las armas de fuego hagan demostraciones o se acerquen a los centros electorales, lo cual, sin lugar a dudas, va a intimidar a aquellos que estén en contra del uso de las armas, y sabemos que estos grupos, conspiranoicos, paranóicos y locos de metra, apoyan a Trump, y éste a ellos.
Igualmente, y ya lo hemos expuesto previamente, las elecciones son un martes, es decir, un día laboral, lo que restringe la capacidad de las personas de acercarse a las mesas electorales, sobre todo de la clase trabajadora, quienes en muchos casos tienen más de un trabajo para sobrevivir, lo que limita su derecho al voto.
Así que nada, ya este informe ya raspó a los gringos, les sale desconocimiento (¿y la OEA?, por cierto).
LEE TAMBIÉN: ELECCIONES EN EEUU: UN VOTO POPULAR SIN NINGÚN VALOR
En resumidas cuentas, el gigante del norte es un país en el que el derecho al voto parece ser un privilegio del blanco con poder económico, incluso para influir a través de contribuciones en las campañas; que tiene uno de los sistemas electorales más excluyentes del mundo, el menos confiable y con mecanismos que coartan que la verdadera expresión popular sea gobierno.
Y, sin embargo, este es un país que quiere darle lecciones de democracia a todo el mundo.
Por cierto, gane quien gane, nada va a cambiar.
Fernando Guevara / Ciudad VLC
