El primer ministro israelí Benjamin Netanyahu compareció este lunes ante el Tribunal de Distrito de Jerusalén, para defenderse de acusaciones en su contra por fraude, cohecho y abuso de confianza en tres casos de corrupción.

Esta es la segunda vez que Netanyahu acude a la Corte desde que comenzara el juicio en mayo y durante la fase de evidencias tendrá que hacerlo tres veces por semana.

 

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Para esta audiencia, el juzgado requerirá que los procesados declaren su culpabilidad o inocencia y se fijará la fecha de la siguiente fase probatoria, antes o después de las elecciones del 23 de marzo.

 

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Mientras el primer ministro permanecía dentro del tribunal, cientos de personas se acercaron a la sede de la corte para exigir la prisión para Benjamin Netanyahu, y lo calificaban de «ministro del crimen»: «No nos rendiremos hasta que dimita», coreaban los participantes.

Netanyahu, de 71 años, 14 de ellos en el poder, está acusado de haber recibido 700.000 shekeles (175.000 euros, 210.000 dólares) en cigarros, champán y joyas a cambio de favores financieros o personales.

 

De ser hallado culpable de los cargos de corrupción, el líder israelí podría ser condenado hasta con diez años de prisión, y de fraude y abuso de confianza, que están penados con hasta tres años de cárcel.

En la apertura del juicio en mayo de 2020, el primero contra un jefe de gobierno israelí en el cargo, Netanyahu había tildado las acusaciones de «ridículas».

 

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Ciudad VLC / Telesur