El Congreso de EE.UU. buscará remover al presidente Donald Trump de su cargo, basándose en la confesión de su exabogado Michael Cohen, quien fue encausado y condenado a tres años de prisión en diciembre por fraude fiscal y por violar la ley sobre financiación electoral.
“La primera gran audiencia del presidente Cummings, principal demócrata en el Comité de Supervisión de la Cámara de Representantes de EE.UU., presentará a Michael Cohen como la primera fase de la campaña coordinada de los demócratas para destituir al presidente de su cargo”, dijo este 21 de febrero el alto congresista republicano Jim Jordan en un comunicado de prensa.
Elijah Cummings asumió el control del Comité de Supervisión luego de que los demócratas obtuvieron el control del Congreso de EE.UU. en las elecciones intermedias celebradas el pasado noviembre.
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Entre otras cosas, Cohen confesó que durante la campaña electoral de Trump había pagado, “a solicitud del candidato”, $280 mil a la exmodelo de una revista de contenido erótico Karen McDougall y a la actriz porno Stormey Daniels para que no hablaran de la relación que mantuvieron con el hoy mandatario de EE.UU. y así no se viera afectada su imagen en la campaña electoral, en la que, de hecho, resultó vencedor. El abogado también confeso haberle mentido al Congreso en una anterior interpelación.
Según informó el pasado miércoles el comité de la Cámara de Representantes del país norteamericano, el exrepresentante legal del mandatario declarará el próximo 27 de febrero en una audiencia pública ante el comité.
En este sentido, Jordan dijo que los republicanos del comité resistirán los intentos de Cummings de limitar el alcance de las preguntas al interrogar a Cohen acerca de sus delitos que se declaró culpable.
Investigan presunta injerencia rusa en elección de Trump
Cohen además de los mencionados delitos, se declaró culpable de numerosos cargos durante el tiempo que ejerció como abogado de Trump, entre ellos delitos financieros y violaciones al financiamiento de campañas, mientras cooperaba con la investigación del abogado especial Robert Mueller sobre el presunto papel de Rusia en la campaña presidencial de EE.UU. en 2016.
Los servicios de inteligencia estadounidenses aseguran que Rusia trató de ayudar a Trump para que ganara las presidenciales de 2016. Por su parte, Moscú refuta dichas acusaciones y considera que se trata de un invento para deslegitimar al magnate republicano, además el presidente estadounidense descartó dicha denuncia de los servicios de inteligencia de EE.UU.
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Ciudad VLC/Tomado de Hispantv y El Heraldo de México