El mal olor en las axilas es el resultado de las secreciones de aquellas bacterias que se desarrollan en el sudor corporal cuando la higiene es escasa o un agente específico que las destruya.
El mal olor de las axilas genera problemas de autoestima y dificultades en el entorno social por lo desagradable e incómodo que puede llegar a ser.
A continuación vamos a compartir 3 interesantes tratamientos que se pueden probar para acabar con este inconveniente.
Desodorante de bicarbonato de sodio para el mal olor en las axilas
Sus propiedades antisépticas y astringentes hacen del bicarbonato un buen tratamiento para limpiar las axilas y deshacerse de ese mal olor.
Materiales:
1 cucharada de fécula de maíz (10 g).
1 cucharadita de bicarbonato de sodio (5 g).
¿Qué debes hacer?
Mezcla los dos ingredientes y aplícalo en las axilas antes de vestirte.
Úsalo dos veces al día para mantener la piel seca y fresca.
Aerosol de vinagre de sidra de manzana
Ayuda a eliminar los malos olores y disminuir el exceso de sudoración.
Materiales:
1 cucharadita de zumo de limón (5 ml).
½ taza de agua (125 ml).
¼ de taza de vinagre de manzana (62 ml).
1 recipiente con spray.
¿Qué debes hacer?
Introduce todos los ingredientes en la botella con spray y agita para que queden bien integrados.
Rocía el líquido bajo los brazos, espera unos minutos y vístete.
Si lo consideras necesario, puedes llevarlo contigo para usarlo varias veces al día.
Exfoliante de limón
Este fruto tiene un penetrante aroma y compuestos que equilibran el pH de la piel para neutralizar el mal olor.
Materiales:
½ limón
1 cucharadita de bicarbonato de sodio (5 g)
¿Qué debes hacer?
Mezcla los dos ingredientes hasta obtener una pasta espesa.
Durante la ducha, antes del último enjuague, aplica el producto con suaves masajes circulares y déjalo actuar 5 minutos.
Úsalo mínimo tres veces a la semana.
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