Don Ernesto Luis Branger Orzattoni, nació en Lons-le-Saunlier (Francia) un 27 de octubre de 1853, fueron sus padres, el capitán de artillería Jean Branger Garnier, caballero de la Legión de Honor francesa y Marie Cecile Orzattoni Cristifini de Branger Garnier. De esta unión nacieron los siguientes hijos: Henri Branger, Eugene Cosme Branger, Pierre Louis Branger, Adelaide Branger y Louise Branger.

Don Ernesto Luis Branger
Don Ernesto Luis Branger Orzattoni

Cursó sus estudios en Córcega, Francia en el liceo Imperial de Bastia, donde obtuvo el diploma de agrimensor (se encarga de realizar mediciones  de las superficies de los terrenos y el levantamiento topográfico) y bachiller en ciencias completas en 1871, cuando tenía 18 años de edad. Un año después, en 1872 fue contratado por la Compañía del Canal de Panamá, siendo de esta manera sus primeros inicios en su larga trayectoria.

Para 1875, cuando él tenía 22 años de edad, llegó a Valencia, donde revalidó su título de agrimensor en el Colegio Federal, que tenía nivel universitario. Allí impartió clases de latín, griego y topografía. En 1879, contrajo matrimonio con la señorita Ana Asunción Párraga, del cual nacen los siguientes hijos: Ernesto Luis, Rafael Enrique, Juan Teodoro, Pedro Luis,  Ana Cecilia, Luis Rafael, Francisco de Sales, Miguel y Federico Branger Párraga.

 

Padres de Don Ernesto Branger Orzattoni

Ernesto Luis Branger y sus principales obras en Valencia

Hablar de Don Ernesto Luis Branger, es al mismo tiempo narrar la historia industrial de Valencia, la cual para el momento de su muerte, las empresas fundadas y poseídas por Branger ocupaban, después de las empresas petroleras, el mayor número de obreros en Venezuela,  aquí un resumen de algunas de sus obras más importantes:

  • Después de la inauguración del acueducto de Valencia del 5 de febrero 1877 el presidente Antonio Guzmán Blanco le concedió una medalla especial. En ese mismo año se empleó en la tenería local de Zavaleta y Revenga.
  • En 1883, fundó una fábrica de pastas alimenticias denominada La Alianza.
  • Para 1887, crea el Tranvía de Valencia, el cual en su primer momento era tirado por caballos y en  1888, crea la empresa de tenería La Asunción.
  • En 1889, fue comisionado por la municipalidad para inspeccionar y recibir las instalaciones del alumbrado público eléctrico.
  • Posteriormente en 1913, fundó la empresa “Aceites Branger”.
  • Para 1917, adquirió las mayorías de las acciones de la C.A. La Cumaca, empresa que contribuyó grandemente al abaratamiento de la energía eléctrica en Valencia.
  • En 1919, fundó Telares Branger que se convirtió en la empresa más importante de la región, en cuanto al número de obreros empleados.
Vista lateral derecho del panteón de los Branger

Acá algunos hechos cronológicos de la excelente trayectoria marcada por los hitos más resaltantes de la vida y obra de este ilustre personaje. Pocos valencianos conocen que sus restos reposan desde aquel triste 29 de diciembre de 1926 en el Cementerio Municipal de Valencia. Noticia que desde luego conmocionó a Venezuela, en especial a nuestra ciudad.

 

El legado humanitario de la familia Branger

 

Vista frontal del panteón de los Branger

 

 

Uno de los aspectos interesantes de la familia Branger, es que fueron pioneros en poner en práctica lo que se conoce como “responsabilidad social del empresario”, concepto que fue conocido a finales del siglo XX y que se trata del compromiso voluntario de las organizaciones corporativas para generar no solamente nuevas plazas de trabajo, sino también impulsar el desarrollo económico y social de sus empleados y la comunidad que los rodea.

Adicionalmente, la familia Branger patrocinó un plan habitacional, que consistió en derribar todas las viviendas viejas e insalubres de sus trabajadores y construir casas modernas con verdaderas condiciones sanitarias. Y algo que no debe ser olvidado, es que en 1918, de acuerdo a los reportes del momento, cuando estaban muriendo un promedio de 100 personas diarias en la ciudad, en su nómina de trabajadores, estaban enfermos 50 empleados, de los cuales solo murió uno.

La Tumba de Ernesto Luis Branger

Placa de Reconocimiento entregada a Don Ernesto Luis Branger

 

Este récord, se debió a un plan de visitas personales a los empleados enfermos en sus casas hasta dos y tres veces por día. A través de este plan se ejecutó un operativo especial con la instalación de cocinas para la preparación de los alimentos adecuados para los pacientes. Este gesto de humanidad y también responsabilidad social, fue lo que motivó a sus empleados de los telares a entregar un reconocimiento a Ernesto Luis Branger y que dice así:

“En el 8° Aniversario de la instalación de Telares Carabobo, el personal de estos, impulsado por un vivo sentimiento de justica y gratitud, presenta muy respetuosamente este sencillo recuerdo, en ofrenda de su cordial y perenne agradecimiento al Señor Don, Ernesto L, Branger, por la generosa cuanto humanitaria conducta que observó comprobándolo eficazmente en los angustiosos días de la terrible epidemia. Valencia 8 de diciembre de 1918″.

 

La Tumba de Ernesto Luis Branger

La Tumba de Ernesto Luis Branger

Finalmente tras su muerte, el sepelio fue una de las más grandes manifestaciones populares realizada en la ciudad. Muchos valencianos desfilaron en homenaje póstumo al impulsor de la industria y la economía no solo de Valencia sino de la región Carabobeña, dando también merecidos honores en denominar vías públicas como la Avenida Branger, entre otros recuerdos que hoy son verdaderos vestigios del pasado.

 

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Con información y fotografías de la época: Correo de Lara, y el libro «Rasgos Biográficos de Ernesto L. Branger de Aníbal Lisandro Alvarado».

Fotografías actuales: Diego Trejo Vestigios del Pasado.

La Tumba de Ernesto Luis Branger

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