Las medidas de bioseguridad y prevención con las que «podemos lograr el rompimiento de la cadena de contagio, deben ser en este momento un Credo», así lo aseguró Domingo Garzaro Rojas, biólogo celular y miembro del Consejo Científico Presidencial que acompaña a la Comisión de Prevención, Atención y Control de la COVID-19 en Venezuela.
«Las medidas de prevención de esta pandemia son principalmente el uso apropiado del tapaboca o mascarilla, el distanciamiento social, la higienización constante de manos y acatar rigurosamente todas las indicaciones que las autoridades sanitarias imparten a la población durante los períodos de cuarentena y flexibilización», dijo el científico en entrevista con la Agencia Venezolana de Noticias (AVN).
El experto en bioseguridad microbiológica de laboratorios y espacios de riesgo aseguró que adoptar las medidas de prevención como parte del quehacer cotidiano, acostumbrarse a usarlas apropiada y responsablemente en la nueva normalidad, como parte de la cultura ciudadana, podría lograr «una baja de la incidencia de enfermedades respiratorias en el país para los años venideros».
«Si aprendemos a que cuando tengo gripe puedo usar un tapaboca, y con esa mascarilla disminuyo los contagios, a la gente que me acompaña en el Metro, en una camionetica, en un taxi, en mi propio vehículo, etcétera, y que además con esta práctica estamos protegiendo a esas personas que hacen vida con nosotros, nuestra familia y los seres que queremos proteger, eso sería magnífico», enfatizó.
El especialista en diagnóstico serológico y molecular de diferentes familias virales, se refirió a las variantes amazónicas, las denominadas P1 y P2, nomenclatura que se usa para designar a las dos mutaciones del virus SARS-CoV-2 que circulan en Brasil. Ratificó que estas mutaciones son más virulentas, ya que circulan con una mayor carga viral e infectan en mayor número a los receptores celulares.
El experto que forma parte del laboratorio de virología molecular del Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas (IVIC) explicó que todas las mutaciones hasta ahora conocidas «sigue siendo el SARS-CoV-2 la enfermedad que se produce, sigue siendo Covid-19, por lo tanto lo que pasa en el cuerpo con las nuevas variantes es lo mismo que pasaba con las variantes anteriores».
No obstante, agregó, que por ser variantes pueden ser «más exitosas en su capacidad de contagio y en su capacidad de infectar a los pacientes, y que además circulen con una mayor carga viral que puedan agravar los cuadros clínicos».
Segunda ola de contagios
Aseguró, el experto que el aumento de casos que se evidencian en la segunda ola que está cursando Venezuela coinciden con la llegada de la variante P1.
«Nosotros en el laboratorio del IVIC detectamos la variante a finales de febrero y principio de marzo de este año, se reportó el primer caso y se hizo el anuncio en cadena nacional de que habíamos detectado un caso de la variante P1, eso no quiere decir que la variante se estaba introduciendo en el país, puede ser que ya había casos de la variante en diferentes partes del país circulando y, que no los habíamos detectado todavía», puntualizó Garzaro.
En su opinión, tanto el relajamiento por parte de la población, en los dos periodos de flexibilización extendida (diciembre) y la amplia (Carnavales), como la propagación de la variante son parte de esa ecuación para el aumento de casos que se están observando actualmente en el país.
«Ambos factores pueden haberse influenciado, de hecho imaginemos que no, que la variante P1 no era parte de la ecuación (…) y, obedece al relajamiento por parte de la población, por una falsa sensación de seguridad. Hay muchas personas que piensa -ya a mi me dio y no me va a volver a dar- y van relajando esa medidas de bioseguridad», enunció el científico y académico.
Sobre el relajamientos citó como ejemplo el caso de Chile, que con la mayor tasa de población vacunada en Latinoamérica, está pasando por una segunda ola de casos «debido a que en ese país circula tanto la variante que circula en Gran Bretaña, como la variante P1″.
De acuerdo con sus declaraciones, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ya hizo un anuncio sobre Chile como el mejor «ejemplo de que la vacunación no sustituye a la prevención».
Vigilancia genómica en Venezuela
Al ser consultado sobre la vigilancia genómica en Venezuela Garzaro Rojas informó que a raíz de la detección de la primera muestra con variante P1 en el país se decidió ampliar el esquema.
Al respecto, comentó que bajo la coordinación de la doctora Flor Pujol, el Laboratorio de Biología Molecular del IVIC, diseñó un esquema de secuenciación genómica que permitirá rápida y aceleradamente obtener resultados sobre que tipo de variantes podría estar circulando en el país.
«Se desarrollaron esos esquemas de secuenciación las variantes de preocupación en el mundo, que eran las variantes que circulan en Gran Bretaña- Inglaterra que es la B1.1.7., la que circula en Sudáfrica que es la B.1.351. y las variantes P1 y P2. Podemos detectar las importantes y algunas de esas accesorias que nos identificaban que variantes estaban circulando».
Detalló que una vez se hizo el primer sondeo de muestras llegaron de diferentes partes de Venezuela y se detectó la variante P1, se decidió acelerar la marcha en esta secuencia.
«De esa manera hemos logrado detectar más de 600 muestras y mandarlas a secuenciar para verificar si llevan la variante o no. Nuestra investigación preliminar ha demostrado que la variante circula en un alta prevalencia en el estado Bolívar, también en la región capital Miranda, Distrito Capital, La Guaira, y está apareciendo en distintos estados del país en Zulia hay un casos», dijo.
Según datos aportados por el experto, en un último estudio de 36 muestras analizadas del estado Bolívar, 34 ya tenían la variante y, agregó que eso «nos está indicando de que la variante se está esparciendo a una gran velocidad» .
Colocó especial énfasis en el llamado responsable y consciente a la población venezolana a no bajar la guardia con las medidas de prevención, al tiempo que elogió el papel de los medios de comunicación y las redes sociales que han mantenido campañas de concientización.
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Ciudad VLC / AVN
