Miembros de organizaciones rurales de Colombia denunciaron el asesinato del campesino Ariolfo Sánchez, ejecutado por fuerzas del Ejército nacional en Anori, departamento de Antioquia, al noreste del país neogranadino.

El activista y defensor de los derechos humanos, Gener Usuga, reveló que la comunidad impidió que los militares se llevaran el cuerpo de Sánchez porque «lo iban a hacer pasar por un falso positivo, una baja en combate», refiere Telesur.

Desde el pasado 8 de mayo líderes sociales y de derechos humanos solicitaron al Gobierno las debidas garantías para que las comunidades que denuncian el incumplimiento a la implementación de los acuerdos del Programa Nacional de Sustitución Voluntaria de Cultivos de Uso Ilícito (PNIS) pudieran protestar.

Por su parte, el vocero de la Coordinadora Nacional de Cultivadores de Coca, Amapola y Marihuana (COCCAM), José David Hernández, precisó que en el Ejército «no tienen los argumentos suficientes para negar que fueron ellos quienes asesinaron al campesino.

El comandante del Ejército con jurisdicción en Antioquia, Córdoba, Chocó y Sucre, Juan Carlos Ramírez Trujillo, aseguró en el Twitter que los hechos son investigados con «el acompañamiento de los organismos de control para esclarecer las circunstancias de tiempo, modo y lugar de lo sucedido».

El lunes pasado, las organizaciones sociales también denunciaron el asesinato de un campesino y heridas a otros tres durante una operacion militar con iguales propósitos en Cúcuta.

Mediante un comunicado, la Asociación Campesina del Catatumbo exigió al Gobierno detener las acciones violentas a través del Ejército, así como garantías para las personas que se encuentran en el lugar.

 

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Ciudad VLC/Telesur

 

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