Los chalecos amarillos manifestaron nuevamente hoy sábado tomando las calles de Francia por décima novena vez. El reclamo es reprimido con contingente militar por una ordenanza del gobierno de Enmanuel Macron, aportando militarmente monitoreo y protección de sitios vulnerables.
Al momento del cierre de la nota iban más de 60 personas y 17 funcionarios heridos. La ministra de Defensa, Florence Parly, asevero que la repartición de tareas entre militares y policías está muy clara. “Se trata de permitir a los policías hacer aquello que solo ellos pueden: el mantenimiento del orden público» dijo.
El dispositivo de seguridad militar, anunciado por Macron, causó preocupación entre los simpatizantes e integrantes del movimiento ciudadano, que, pese a eso, no claudicó en una nueva salida a las calles.
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El gobierno francés prohibió la manifestación de los Chalecos Amarillos en los Campos Elíseos, asimismo amenazo con multas entre 38 y 135 euros a los que “violen el orden”, advirtió la policía.
Desde hace cuatro meses, el movimiento se encuentra manifestándose todos los sábados de manera consecutiva, rechazando las políticas neoliberales del presidente francés y su Gobierno, y exigiendo exigiendo mayor justicia social.