Tal se esperaba en forma sensata, triunfó el presidente Nicolás Maduro Moros, en lo que
representa su reelección para el próximo periodo 2025-2031. Abordo esta sexta entrega sobre el tema electoral, pretendiendo realizar un balance, al menor preliminar, de tan importante evento, aun en desenlace. Nicolás Maduro Moros según el boletín anunciado por el Consejo Nacional Electoral (CNE), a las Oh, 6 minutos, del día 29 de julio, con un 80% de las actas escrutadas y una tendencia irreversible en intención de votos, totalizó como ganador, 5.150.092 votos y un 51,20%, contra la votación de Edmundo González Urrutia, de la oposición extremista (MUD), con 4.445.978 votos para un 44,02%. Los ocho candidatos restantes obtuvieron 462.704 votos para 4%. Se cumplió así, con un paso inicial sustancial, de lo que debe ser su etapa final.
El rector presidente del CNE Elvis Amoroso denunció que el sistema cibernético del ente comicial había sufrido un saboteo, que impidió una transmisión de las actas con prontitud. Por múltiples ataques hubo retardos al proceso cumplido. Gracias a un trabajo tesonero de técnicos informáticos, pudieron avanzar, pese a todo, para garantizar este primer boletín con cifras irreversibles, como se estila siempre, estableciendo un resultado decisivo, más allá del faltante para el escrutinio final. La denuncia sobre el saboteo al CNE puso en evidencia el plan terrorista realizado para impedir fueran conocidos los resultados oficiales. El “candidato” Edmundo González y su “operadora” o “dueña”, María Machado, junto a su equipo destabilizador y sus “comanditos” criminales contratados, habían programado que ante la ausencia de resultados del CNE, ellos harían valer “sus actas”, en los que ventajosamente ganaba su representante.
Aún cuando fue develado este plan subversivo, desde esa misma madrugada, los días
subsiguientes, principalmente lunes 29 y martes 30 de julio, la oposición extremista dio riendas sueltas a sus planes violentos, con la operatividad de distintas bandas criminales. En diferentes zonas populares de Caracas y de buena parte del país, hubo quema de instituciones de salud, educativas, políticas, del CNE, junto a la agresión de transeúntes, sus bienes y otros desmanes, disfrazado todo como “protesta popular”, en repudio del supuesto “fraude” cometido, contra Edmundo González. Todo este clima ha pretendido reeditar el caos y la violencia callejera de otros tiempos, con el fin de crear las condiciones de un golpe de Estado en nuestro país.
Se ha ratificado lo ya denunciado desde tiempo atrás, incluso desde la celebración truculenta de unas elecciones primarias que esta oposición golpista realizó en octubre del año pasado.
En esa oportunidad negaron la participación del CNE y resultó “electa” con una clara adulteración de votos, la señora María Machado, como su representante, aún cuando el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) había recién ratificado su inhabilitación política por 15 años. Son innumerables los desmanes cometidos por ella contra nuestro país, que incluye su petición de invasión extranjera al país, que ha mantenido siempre. Esta participación electoral de la Plataforma Unitaria” (PU), su “candidato” Edmundo González, bajo el control de esta líder extremista, no fue sino una mascarada, para reincidir en sus planes golpistas de siempre. “Cantar fraude” y desconocer unos resultados que sabían no les favorecían. Reincidían en su práctica antidemocrática.
Pudiéramos decir que representa un irrespeto a su propio electorado, que convencidos o
engañados, ha creído en su propuesta extrema y anti nacional y les ha votado en un número
importante, lo cual al parecer, poco les importa. En esta oportunidad, sabiendo que la gente que les apoya podían y pudieron votar por su fórmula, pero no así, asumir la violencia que
convocaron en otras épocas, muy en especial desde las urbanizaciones de clase media alta,
montaron un plan violento para desconocer los resultados, apoyándose en contratación de delincuentes y bandas criminales, para que hicieran “trabajo sucio”, de destrucción y muerte desde las zonas populares, que en muchos casos han afectado indiscriminadamente a personas y bienes, de sus propios partidarios. Afortunadamente toda esta violencia irracional ha ido mermando con el apoyo de las fuerzas policiales-militares, que en forma firme y evitando los excesos han logrado la detención de los principales implicados y el restablecimiento de la calma.
Este nuevo proceso desestabilizador igualmente ha tenido apoyo externo de los EEUU., que siempre mantiene ese “doble juego” de promover supuestos diálogos y a la vez experimentar “todas las opciones”, que signifiquen la posible sustitución de un gobierno como el existente en Venezuela, que se ha negado a la sumisión y la dependencia. Todos los factores golpistas externos se han orquestado contra el Gobierno Bolivariano. Desde los descalificados dirigentes opositores del anterior “interinato”, que han desangrado al país con el desfalco de nuestros recursos, sus medios de comunicación y palangristas tarifados, pasando por una legión de expresidentes ultraderechistas neoliberales del continente y más allá, que unen sus voces en esta nueva trama golpista. Una vez más deben ser derrotados con la verdad y nuestra resistencia.
Ante el daño causado al sistema automatizado del CNE, que está siendo reparado, pero que podría tardar algo en concluir los cómputos electorales finales, es positiva la acción del Jefe de Estado, al concurrir a la instancia del TSJ, específicamente a la Sala Electoral, para que realice una indagatoria completa de todo el proceso cumplido en estas elecciones presidenciales 2024. Que pueda darse un dictamen legal, que permita dar mayor legitimidad a todo lo acontecido. Se trata de involucrar al más alto tribunal judicial de la república, para que certifique la
transparencia con la que se ha actuado. Se convocaran a todos los actores, los candidatos, los partidos políticos y sus representantes, al CNE, a sus autoridades y personal técnico que se requiera, para una evaluación seria y confiable, como se reclama. Para los sectores opositores extremistas, esto no tendría validez, en tanto desconocen todas las instituciones del Estado.
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El Ministerio Público por su parte ha venido cumpliendo su labor. Han anunciado más de 1000 detenciones de involucrados en actos violentos, buena parte de ellos con antecedentes penales, a quienes se les seguirá el procedimiento judicial respectivo. El saldo de daños causados hasta ahora es incalculable. Hay unos 77 funcionarios policiales heridos y un militar activo fallecido en Maracay, de un tiro en el cuello. Esta violencia irracional debe ser contenida y el pueblo todo necesita regresar en a su rutina de vida y trabajo. Debe imponerse la paz nuevamente ante esta nueva arremetida golpista. El fascismo criminal y antidemocrático en Venezuela no pasará!
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José David Capielo Valles es ingeniero agrónomo y magíster en Desarrollo Rural, egresado de la Universidad Central de Venezuela (UCV), Campus Maracay. Nacido en Coro, estado Falcón, en 1949. Es docente jubilado de la Universidad Nacional Experimental Simón Rodríguez (UNESR), Núcleo Canoabo (2016). Es locutor, comunicador alternativo y colaborador de Ciudad Valencia desde 2014.
La Universidad Politécnica Territorial de Falcón “Alonso Gamero” (UPTAG) publicó digitalmente, en noviembre de 2023, su libro “Del Medanal Venimos. Un ensayo autobiográfico reflexivo”.
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