No sería de extrañar que por cuarto año consecutivo la audiencia televisiva del Juego de Estrellas de Grandes Ligas siga bajando, esto debido a que se mantiene el mismo esquema de escogencia de los 64 peloteros para este llamado clásico.
Sigue siendo común que el público elige a peloteros con tremendas campañas, pero que no tienen mucho interés de participar, otros pasan por una lesión y algunos ni siquiera tienen números de estrellas, pero que son populares y los eligen sin tomar en cuenta esas estadísticas.
Además cuando los managers tienen que completar el roster, primero deben escoger los jugadores de los equipos al que no le eligieron ninguno, pero que deben tener representación, así el jugador no tenga pinta de estrella, lo que obliga a dejar por fuera a muchos que si tienen estadísticas y pinta para estar allí. Un sistema complaciente.
En esta edición que se jugará el 16 de julio, la mitad de los seleccionados (32) serán debutantes como “estrellas” en el clásico. No es que se cuestione la presencia de “novatos estrellas” en estas convocatorias, porque con la primera es que comienzan su historia, pero si se cuestiona es la cantidad o es que acaso las otroras verdaderas estrellas que acumulan varias participaciones, ya no quedan muchas.
Tal es así que hay menos seleccionados de jugadores nacidos fuera de Estados Unidos, que de novicios. Solo 24 son foráneos, con 10 de Dominicana a la cabeza, Venezuela (seis), Japón y Puerto Rico (dos) y con uno, Canadá, Cuba, Curazao y México.
Esperemos que el sistema de escogencia mejore, porque sería decepcionante que algo tan llamativo como ha sido esta cita de Estrellas, se convierta en un agujero negro.
TBT… El 10 de julio de 2012, Pablo Sandoval conectó el primer triple con las bases llenas en la historia del Juego de Estrellas de las Grandes Ligas, el bate con el que disparó el tablazo fue enviado al Salón de la Fama.
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Ciudad Valencia
