El respaldo y soporte de valor del Petro está concentrado en las riquezas de Venezuela: petróleo, acero, oro, diamante, entre otros recursos, los cuales dan sostén económico y estabilidad real al activo digital que el Estado venezolano otorga al criptoactivo nacional.

En este sentido, se consolida a partir de una base material, jurídica y financiera y es la única criptomoneda del mundo que cuenta con una estructura que le concede estabilidad frente a la volatilidad extrema de los mercados especulativos, de las tendencia volátiles de las divisas virtuales. 

Actualmente, existen casi tres mil tipos de criptomonedas circulando como intermediarios de pago e inversión en el sistema financiero.

Hay que indicar que, en su generalidad, «soportan su valor» bajo un esquema de confianza otorgado por sus usuarios, es decir, en una especie de apuesta para su mayor crecimiento a futuro.

Ese mismo atractivo, denominado «confianza» es el que se traduce para la aceptación del concepto dólar, que tiene como respaldo sólo el incesante trabajo de las grandes máquinas de impresión de las oficinas de grabado de la Reserva Federal de los Estados Unidos, ubicadas en Washington y Fort Worth, en Texas.

Es necesario dejar claro, que el valor intrínseco o real de la moneda estadounidense no existe, ya que es un dinero solamente creado; es decir, son sólo billetes emitidos bajo demanda. Tan es así, que sus propios generadores limitan la duración de la circulación del recurso – que no tiene valor que lo soporte – al otorgarle como vida útil de circulación 18 meses.

La gente desconoce que los billetes de 50 y 100 dólares pueden permanecer en el mercado de intercambio hasta 8 años; los de 20 cuentan con un promedio de 2 años, mientras el más popular, el billete de un dólar, tiene una vida media de 5,8 años de operatividad.

La conveniencia económica impuesta a la gente, en la cual, también se basa el dólar para circular, lleva casi 50 años de ejercicio bajo la utilidad del dinero fiat, entiéndase este término como «hágase» o inorgánico, y emergió por decreto del gobierno estadounidense, en momentos que se prohibió cambiar dólar por oro o plata, con ello, perdió su respaldo tangible y ahora solo le es atribuido el convenio.

El Petro, en cambio, además de contar con una estructura tiene una medida de valor y se viene consolidando como un instrumento de intercambio, también es un medio de pago y cuenta con reservas de riquezas materiales, comprobadas y muy elevadas.

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Ciudad VLC/AVN

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