El primer ministro de Armenia, Nikol Pashinián, informó recientemente que casi cinco mil desplazados de Nagorno Karabaj arribaron al país, debido a la reciente operación militar de Azerbaiyán en el enclave.

El Gabinete de ministros, a través de Telegram, reportó que 4.850 refugiados procedentes de Nagorno Karabaj han ingresado a Armenia.

De los cuales, 3.900 desplazados ya han sido registrados y otros 950 están en proceso de trámite.

En este sentido, el Ejecutivo señaló que garantizan alojamiento para todos los desplazados de Nagorno Karabaj que no dispongan de vivienda.

Previamente, Ereván (capital armenia) reportó 2.906 desplazados con aproximadamente la mitad de ellos alojados temporalmente en un centro humanitario en Kornidzor, localidad fronteriza con Azerbaiyán, ubicada a unos 150 kilómetros del enclave armenio.

 

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Las autoridades de la autoproclamada república de Nagorno Karabaj anunciaron que aquellos ciudadanos evacuados por la operación militar azerbaiyana de la semana pasada podrían ser transportados a Armenia.

Por su parte, Bakú (capital azerí) aseguró permitir el paso de los desplazados con la asistencia de los pacificadores rusos y dispuso 30 autobuses para ello.

El traslado de los desplazados permitirá que el resto de los ciudadanos que deseen abandonar Nagorno Karabaj, después del anuncio de Azerbaiyán de reintegrar el enclave armenio en su esquema administrativo, también lo hagan.

Este lunes, en Ereván, más de 140 personas fueron detenidas en medio de protestas que exigen la renuncia del primer ministro de Armenia, Nikol Pashinián, según informaron las autoridades policiales.

Sin embargo, la oposición armenia, reunida en el Comité Nacional, afirma que el número de detenidos supera ya los 200, incluyendo varios diputados.

Los opositores están exigiendo la dimisión de Pashinián, a quien acusan de no haber actuado en defensa de los armenios de Nagorno Karabaj, quienes se rindieron ante Azerbaiyán después de la ofensiva azerí del 19 de septiembre.

Tras una operación relámpago el martes pasado, Azerbaiyán bombardeó el enclave armenio ante la mirada indiferente de la comunidad internacional.

 

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Bakú justificó su accionar como una “operación antiterrorista” para restaurar el “orden constitucional” y expulsar a los armenios del Nagorno Karabaj.

El ataque azerí duró unas 24 horas y dejó un saldo mortal de 200 personas muertas, entre ellas civiles, y más de 10 heridos.

Nagorno Karabaj es una zona entre ambas naciones, que anteriormente perteneció a Armenia, pero que fue anexionada por Azerbaiyán tras la caída de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URRS) y una serie de combates entre ambas naciones.

 

Ciudad Valencia / Telesur