Simón Bolívar nuestro, de la América toda. Libertador… A 189 años de aquel 17 de diciembre, le honramos sabiendo que vive y es como un relámpago, como un fuego sagrado.
«Qué grande eres padre Bolívar, qué grande serás para siempre». Hugo Chávez Frías
Bolívar, toma mi canto
Mi canto no se alza hoy a tu frente,
ni a tu brazo.
Anhela probar el gusto de tu corazón.
Busca tu pecho, lo hiende, lo penetra,
porque quiere gustar el sabor bullente
de esa eterna sangre.
Unta sol en mi voz, sol de tu corazón;
unta luna de tu corazón en mi voz.
Pon en mi canto el gusto que saboreaste
en el intento y en la victoria y la derrota.
Aparta tu mágico pensar
y dame tu vibración íntima, humana…
Dame lo que sentiste en el éxito,
lo que palpitaste en los cabales desengaños,
lo que sufriste sin decirlo,
las lágrimas que enterraste vivas…
Y andaré por las cálidas costas,
y escalaré los montes esbeltos
y atravesaré las anchas aguas
y mi voz irá grávida en tu vida.
Podré decir entonces a los hombres:
os amo en patria, tomadme,
bebed mi sangre y gozad mi sacrificio.
Y podré perdonar a los que enredan tus caminos,
a los que no te buscan espontáneos,
a los que se conforman con tu bronce…
Enriqueta Arvelo Larriva
Balada para el encuentro de los eternos
¡Oh, Bolívar
de la añoranza
y el coraje!
Este viento del sur
trae tu estela
indomable
en el rocío
sobre los Andes
y tu tropel de caballos
vuelve a resonar
en las laderas
del espíritu
nuestroamericano
que hoy renace.
¡Oh, Bolívar
de volcán encendido
y quiméricos encuentros!
Tú que palpitaste al borde del ensueño y cabalgaste sin tregua hasta lo imposible,
alma insatisfecha en busca bravía de la emancipación,
idilio de mar,
ilusión inquebrantable.
¡Oh, Bolívar
de la poética,de los epistolarios
y la palabra en filo!
Tú que subiste al atalaya del universo en marcha infalible
hacia la libertad,guerrero del delirio
envuelto en el manto de iris,
aún en medio
de las mezquindad este fuiste al galopea redimir las estrellas.
¡Oh, Bolívar de la tormenta y la independencia!
Siempre meditando en medio de placeres,ruidos y balaceras,siempre al trino de los tumultos,atento ante la ignominia del trono y a la altura de los demonios del reformismo.
¡Oh, Bolívar generoso y desprendido!
Incluso corriendo entre los escollos de la guerra y los traidores,mantuviste tu honor intacto,tu hidalguía de revolucionario.
¡Oh, Bolívar
de las grandes epopeyas
y los laureles!
Ya no eres
bronce inmóvil
en las plazas,
ni fecha celebrada
anualmente
por infames al acecho,
hoy tu figura inmortal marca el horizonte nuevo
y luchamos también
contra las últimas
auroras y sepulcros.
¡Oh, Bolívar
glorioso y anhelante
de lealtad!
Recibe a Chávez en tu regazo,tu hijo más fiel,
el mejor de los nuestros,
dale un abrazo eterno
que ilumine los astros
del para siempre,cuídalo con más rigor
de lo que lo hicimos nosotros,
en él habita el futuro
que hacemos hoy,
en su mirada victoriosa
de mil batallas y su espíritu sosegado sobre un chinchorro en el Cajón del Arauca,
está la patria que somos.
Mayako Hernández
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Poema Credo
Creo en la Libertad, Madre de América creadora de mares dulces en la tierra, y en Bolívar, su hijo, Señor Nuestro que nació en Venezuela, padeció bajo el poder español, fue combatido, sintióse muerto sobre el Chimborazo, resucitó a la voz de Colombia, tocó al Eterno con sus manos y está parado junto a Dios.
No nos juzgues, Bolívar, antes del día último, porque creemos en la comunión de los hombres que comulgan con el pueblo, sólo el pueblo hace libres a los hombres, proclamamos guerra a muerte y sin perdón a los tiranos creemos en la resurrección de los héroes y en la vida perdurable de los que como Tú, Libertador, no mueren, cierran los ojos y se quedan velando.
Miguel Ángel Asturias
Ciudad VLC/Orimar Meneses/Ilustración: Omar Cruz
