La Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) en Colombia, advirtió sobre desplazamientos masivo de 65 familias en zonas rurales del municipio de San José de Uré, situado en el departamento de Córdoba, norte del país.

Estas familias compuestas por un total de 225 personas de comunidades campesinas e indígenas se han visto forzadas a desplazarse por el accionar de grupos armados que operan al margen de la ley, señala la organización internacional, de acuerdo con nota de Telesur, en su portal web.

La OCHA informa que la primera ola de desplazamientos ocurrieron el pasado 12 de noviembre, en la comunidad indígena Emberá Katío en Batatadó hacia el centro urbano del municipio, afectando cerca de 67 personas que fueron ubicadas en un alojamientos temporales en la Alcaldía; asimismo, otros 106 ciudadanos de la comunidad campesina también se desplazaron por la arremetida de grupos paramilitares.

Cifras que indican el movimiento de desplazados en Colombia

 

 

El último 15 de noviembre alrededor de 1000 personas abandonaron los municipios de Ábrego y La Playa del Belén en el Norte de Santander, debido a enfrentamientos entre los grupos del Ejército Popular de Liberación y Ejército de Liberación Nacional (ELN).

En ese sentido, la oficina internacional alerta el desplazamiento de la población campesina e indígena en las últimas semanas en el departamento de Córdoba. Según el informe de OCHA en el departamento 225 personas son víctimas de desplazamiento, de las cuales 80 son menores de edad.

Las actividades de sustento en las zonas son el trabajo de extracción de caucho, minería artesanal y actividades agrícolas se han visto limitadas por la prohibición que hacen los grupos armados para circular.

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Desplazamientos en Colombia buscan la seguridad

El 2 de noviembre, cerca de 80 personas (21 familias) provenientes de dos veredas (La Capellanía, y los Cascos) del municipio La Playa de Belén se desplazaron hacia el casco urbano del municipio de Ocaña como medida de protección, según información de la alcaldía de Ocaña.

Según fuentes locales, miembros del EPL llegaron a estas veredas intimidando a la población con una lista de personas en particular, a quienes les dieron media hora para salir del territorio; siete de estas familias (27 personas) también decidieron desplazarse posteriormente hacia la ciudad de Cúcuta, manifestando no sentirse seguras en el municipio de Ocaña y en busca de protección.

La situación de desplazamiento ha ocasionado necesidades sectoriales y restricciones de acceso a bienes, servicios y derechos, requiriendo atención urgente.

Los números muestran el movimiento poblacional interno obligado por la guerra

De las 945 personas desplazadas, aproximadamente 405 son niños, niñas y adolescentes (NNA), lo cual equivale al 42 por ciento de la población total desplazada; la ocurrencia de este hecho victimizante ha ocasionado restricciones de acceso a la educación a los menores en situación de desplazamiento ante la imposibilidad de asistir a clases, además de ponerlos en situación de vulnerabilidad.

 

 

Ciudad VLC / VTV

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