Inicio esta primera publicación del año 2023 deseándoles a los asiduos lectores un año de mucho éxito que supere las expectativas de todos y, a su vez, agradeciéndoles su constante respaldo a las labores realizadas en Ciudad Valencia y a todo su equipo. En esta primera edición, quiero plantear esa inquietud musical presente y manifestada por ciertos seguidores de la Salsa, locutores, productores radiales, periodistas, músicos en cuanto a ¿qué pasará con ésta, desaparecerá, volverá alguna vez ese afinque de los años 70´s o seguirá intermitente con uno que otro artista u orquesta sonando?
Todas estas interrogantes surgen a raíz del bajo nivel en el cual se encuentra hoy en día esta popular, compleja y rica corriente musical después de haber vivido ese boom de los 70´s, y ese empoderamiento de la Salsa Romántica de las dos décadas posteriores.
Las respuestas, por supuesto, varían y van desde lo más simple y directo hasta lo radical. En cuanto al talento de los músicos, en todos los países donde se cultiva esta música, ¿será que no poseen una formación a la altura de los protagonistas de ese boom salsero y, por tanto, no gozan del mismo prestigio, es decir, no hay relevos?
En lo particular no creo que sea ese el caso, debido a que si algo es notorio en los países latinoamericanos y en Estados Unidos es el creciente potencial de jóvenes con gran calidad técnica y formación profesional buscando abrirse paso para escalar y éstos pueden ser comparados, en ese aspecto, con los mejores músicos de los años 70´s.
En torno a la Salsa de hoy, algunos expertos afirman, tal es el caso de Eddie Palmieri, palabras más palabras menos, que “La Salsa del presente es un desastre, no se aprecian solos de bongós, de congas, de piano y demás instrumentos, que si vas a una discoteca a bailar debes llevarte una almohada para dormir”. Por otro lado, el maestro y timbalero Willie Rosario ha dicho: “A la Salsa la pueden herir, pero jamás la matarán”.
El sonero Henry Fiol, considera, por su parte: “Ese afinque de los 70´s no volverá, la Salsa actual carece de esos elementos agresivos del mambo, las moñas y, por el contrario, es muy pasiva y sus letras monótonas”.
El cantante Tito Nieves, como cultor de la Salsa romántica de los 80´s a pesar de venir de la escuela y el swing del Conjunto Clásico, afirma: “Con la Salsa Romántica se le comenzó a cantar a la mujer, al amor con letras comprensibles”. No obstante, es muy respetuoso y admirador del trabajo, la trayectoria y la vigencia de Palmieri y Rafael Ithier, pianista y director del Gran Combo de Puerto Rico.
Más allá de todo lo dicho, esa frase: “La Salsa puede morir”, obviamente carece de sentido lógico, ya que de ser así tendría que morir el Son, la Guaracha, el Mambo, el Danzón, el Cha cha chá, el Guaguancó, la Charanga, la Bomba, la Plena, entre otros géneros que la conforman.
Sin embargo, hay un factor clave del cual se habla muy poco y, sin duda, alguna fue determinante y el principal soporte de esa euforia salsera de las décadas mencionadas, la presencia de los productores, es decir, esos inversionistas que creyeron en el talento de los músicos y apostaron al triunfo creando empresas, sellos disqueros patrocinando a figuras prometedoras con potencial, conformando orquestas, negocios donde presentaban a las orquestas y una promoción férrea y continua a través de emisoras de radio, televisión, revistas y otras vías al punto de producir películas.
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Como agentes protagonistas de esta arriesgada faena hay que mencionar al señor Al Santiago, pionero en la creación de los formatos orquestales All Stars y personaje creador de la orquesta Cesta All Stars, liderada por Charlie Palmieri y Joe Quijano.
Otro grade y el más sonado fue Jerry Masucci, con el sello disquero Fania y la Orquesta Fania All Stars, junto a su socio el dominicano Johnny Pacheco. Y otro productor no menos importante fue Ralph Mercado con su sello disquero RMM, quien se extendió hasta principios del presente siglo e impulsó la carrera de artistas como La India, José Alberto “El Canario”, Marc Anthony, Tito Nieves, Tony Vega, Domingo Quiñones, entre otros.
El músico y arreglista boricua Isidro Infante está convencido de que por muy buenos talentos que puedan aparecer, si no se cuenta con el debido respaldo de productores difícilmente podrá destacarse el buen trabajo que desempeñen.
Por último, Sergio George, uno de los músicos, arreglista, compositor y productor más respetado en los actuales momentos de origen estadounidense, coincide en que si no hay inversión se torna muy complicado desarrollar proyectos y consagrar artistas, además considera que la Salsa para mantenerse necesita evolucionar y fusionarse con otras tendencias las cuales puedan atraer a nuevas generaciones. Este criterio de Sergio ha sido criticado por algunos, quienes después han evidenciado que sus propuestas algo atrevidas han funcionado.
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Ramón Emilio Toro Martínez (Caracas-Venezuela, 1966) es licenciado en Educación, mención Lengua y Literatura, de la Universidad de Carabobo (UC) en 1993. Es también Productor Nacional Independiente y locutor con experiencia en el desarrollo de programas radiales sobre música afrocaribeña en la ciudad de Valencia, estado Carabobo: Ciento por ciento Natural, por Lago 91.5 FM; Letras y Notas, por Salsera 96.3 FM, y Óyelo que te conviene, por RNV Región Central 90.5 FM. Es autor del libro «Letras y Notas sobre la Música del Caribe» (2020), presentado en la FILVEN Caracas 2020 (Casona Cultural Aquiles Nazoa) como el único proyecto editorial independiente de ese año.
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