Habitantes de diversos sectores de Valencia, estado Carabobo, exigen que se respete el libre tránsito peatonal por aceras, calles y demás espacios públicos.
La razón de esta exigencia se debe a que ante el crecimiento del comercio informal descontrolado, muchos de quienes ejercen libremente esta actividad económica han ocupado esos espacios peatonales con tarantines y mesas improvisadas, contraviniendo lo estipulado en la ordenanza municipal.
Esta establece, por un lado, que el comercio informal no deberá producir ningún obstáculo para el libre funcionamiento del flujo vehicular y/o peatonal; por el otro, que cuando esa ubicación se realice en aceras o senderos peatonales, se deberá dejar un área libre sin obstáculos de no menos de 1,80 metros lineales, situación que no ocurre.
Es importante destacar que esta problemática es de vieja data, sin embargo, los transeúntes y conductores ven con preocupación que en sectores como Santa Rosa, Monumental, avenida Las Ferias, Flor Amarillo, La Isabelica, La Candelaria, entre muchos más, prácticamente no se puede caminar libremente por las aceras.
Aceras abarrotadas
Ante la notable restricción del paso peatonal y vehicular, con avisos, tarantines y mercancía de todo tipo, tanto comunidad como sectores comerciales formales valencianos proponen a las autoridades municipales reubicar en espacios idóneos a los trabajadores de la economía informal, con el fin de descongestionar las vías y permitir la libre circulación peatonal.
María Ortiz, quien habita en el casco central de Flor Amarillo, asegura que especialmente los fines de semana, las aceras, desde las cercanías de El Alboral, hasta la entrada a Bucaral Sur, son abarrotadas por comerciantes informales.
“Tenemos que caminar por la calle, ya que las aceras están ocupadas permanentemente. Hasta los negocios formales sacan sus mercancías. Sería bueno que se habilitarán esos espacios ociosos para que ellos trabajen y los peatones tengamos un mejor acceso a las aceras o cominerías”, recalcó Ortiz.
Motorizados y ciclistas también violan normativas
Por su parte, José Manuel Hernández, habitante del sector Francisco de Miranda, manifestó su preocupación porque al comercio informal descontrolado, en aceras y calles, se le suma la circulación de motos y bicicletas que salen desde cualquier parte.
“Es evidente la cantidad de negocios formales e informales ocupando las aceras, situación que nos obliga a caminar por la carretera, corriendo también el peligro de ser alcanzado por motorizados y ciclistas, quienes violan las normativas legales al conducir de manera irresponsable en ambos sentidos”, reseñó Hernández.
Mayor seguridad
Transeúntes insisten en que en las diferentes calles de la ciudad debe haber más seguridad para que el camino peatonal no se vea obstaculizado.
“Agarran toda la acera y eso limita el paso, entonces nos obligan a caminar pegado o a tropezar con la mercancía que está en el suelo”, comentó Pedro Rosales, habitante de La Isabelica.
Ejercicio de la actividad comercial
En muchos municipios se han destinado espacios para el ejercicio de la actividad comercial de manera controlada, cumpliendo con todos los requisitos administrativos y jurídicos pertinentes.
En este sentido, hay una serie de ordenanzas que regulan qué tipo de actividades se pueden llevar a cabo, el horario, restricciones, condiciones de salubridad, permisología, entre otros aspectos de importancia.
Caso Bella Florida
Por este mismo tema y ante las reiteradas denuncias de los habitantes de Bella Florida, Los Caobos y Los Parques (sectores de la parroquia Miguel Peña), recientemente la Alcaldía de Valencia restableció el orden en aceras y vías públicas de estas zonas.
Los vecinos agradecieron la pronta respuesta, a la vez que solicitan que este tipo de operativos sea permanente para que se cumplan las ordenanzas referentes a la organización de los espacios y el aprovechamiento de los mismos, tanto para los mismos comerciantes, como para los transeúntes.
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Wilfredo Sandoval / Ciudad Valencia
Foto: Edgar Mercado
