«Cómo sobrevivir al diciembre y no morir en enero», por Guillermo Vizcaya

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«Como sobrevivir al diciembre y no morir en enero»

 

El capitalismo explotador, adoctrinó a nuestra clase trabajadora a rendirle algún beneficio extra a nuestra población en el mes de Diciembre, pero ésa dádiva, no podía venir sola, tenía que venir acompañada de una sarta de publicidad, dirigida a crear ansiedad, desmesura y angustia en nuestra población.

 

Vivo en el centro de Valencia desde hace 25 años, se de lo que hablo, como zombies deambulantes y de manera creciente, los veo llegar al centro, sumergidos en la esperanza fútil de emparejar, los desniveles financieros del año.

 

Las licorerías abarrotadas, las calles del hambre (Templos de la mala salud) y los comercios de ropa y juguetes, muestran la evidencia siempre predecible: Estamos en Diciembre.

 

Lo peor es que todo aquel que se resista y haga una crítica, ya el sistema le tiene preparado un adjetivo… Grinch, Scrooger o pavoso. Si ustedes me dan permiso, describiré, algunas actitudes que percibo de esta temporada…

 

1)  La infame desesperación por lograr alguna meta irrealizable en el transcurso del año. Sigue trabajando hermano, a lo mejor es para febrero, apurado te puede salir defectuosa.

 

2) La desesperación snobista en satisfacer, los esquemas impuestos por la navidad comercial… entiéndase, estrenos, juguetes, pinturas y pare contar.

 

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3) El fomento perpetuo del ciclo culminado,  es decir, el fin de año como si fuera el fin de la vida. Hermanos, enero es tan importante como diciembre y así, todos los meses.

 

4) La seudo felicidad, entiéndase, el deseo compulsivo de ser feliz en esta época, a través de la alegría comercial y/o la ingesta desproporcionada de licor.

 

5) El síndrome de la renovación, elegir ésta fecha para, ahora sí, definitivamente, cambiar el carácter, la forma de vestir, lo ahora llaman Reinventarse. (Incluso los más osados cambian de pareja)

 

6) La postergación de la salud, «mejor lo retomamos en enero, porque en diciembre es imposible».  Amiga, amigo, cuídese en diciembre, las estadísticas de mortalidad en los meses de enero y febrero, son muy altas, debido a los excesos de navidad.

 

7) La falta de prevención financiera, los meses después de la navidad, son por su propia naturaleza, muy difíciles, piense en ellos antes de seguir gastando en cosas que no le aporten ninguna estabilidad.

 

8) El cortoplacismo, (La vida hay que vivirla, día a día, como sí éste fuera el último día) expresiones que, sacadas de su contexto, nos pueden poner ciertamente a vivir, el último día.

 

El tiempo es la vida y la vida es tiempo vivido, el tiempo no sabe que, él está en diciembre o en abril, el tiempo transcurre sin cesar, usted está dentro de ése tiempo, mientras viva, lo que quiere decir que la mayor satisfacción o ganancia, estará en sacarle la mayor cantidad de tiempo al cupo de vida que le asignaron, podemos gozar todo el año, mejorando nuestra calidad de vida, pero, con todo respeto, veo perjudicial el estado de estrés que en nombre de la nostalgia navideña, ponen a gran parte de la población en un corre y corre, bastante dañino.

 

El tiempo es la divisa de tu vida. Es la única divisa que tienes, y solo tú puedes determinar cómo será gastada. Sé cuidadoso y no permitas que otras personas la gasten por ti (Carl Sandburg)

 

 

Ciudad Valencia / Autor: Guillermo Vizcaya