Empanadas horneadas de ricota y calabacín para alimentarse con pocos ingredientes y pasar un rato con tu familia preparando esta rica y fácil receta.
La Ricota es uno de los quesos más tradicionales de Italia. El mismo viene de la segunda cocción del suero de la leche que queda tras la elaboración de la mozzarella di bufala.
De ahí su nombre ricotta (ri-cotta = re-cocción). El suero de leche que queda tiene sólidos de leche y una proteína llamada albumina, que se solidifica a altas temperaturas.
Este alimento es además rico en calcio, en vitaminas del complejo B (como la vitamina B12) y también en proteínas de alta calidad biológica.
Ingredientes para las empanadas horneadas de ricota
• 1 paquete de discos de masa para pastelitos
• 1 taza de queso ricota con sal
• 1 calabacín mediano firme y verde
• 3 cucharadas de aceite de oliva
• 2 huevos ligeramente batidos
Preparación de las empanadas horneadas de ricota y calabacín
Se lava bien el calabacín, se corta en dos y, con la ayuda de una cuchara, le sacamos las semillas y las desechamos, luego lo cortamos en cuadritos bien pequeños, se saltea en una sartén con el aceite de oliva, sal y pimienta al gusto, y dejamos enfriar aparte.
Cuando ya el calabacín salteado esté a temperatura ambiente, lo mezclamos con el queso ricota. En una superficie limpia o tabla de trabajo, extendemos uno a uno los discos de masa, ponemos la mezcla ya elaborada en el centro y, con una brocha de repostería, pintamos con el huevo batido los bordes de la masa.
Luego, con la ayuda de un tenedor, presionar los bordes y con los dedos vamos cerrando los bordes de la empanada, haciendo ondas. Las colocamos en una bandeja de hornear engrasada y las pintamos con el huevo batido, las horneamos a 350 grados hasta que doren, y listo, buen provecho.
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