El día de hoy hablaremos de una pieza del compositor italiano Stefano Landi (1587-1639), llamada Passacaglia della Vita (Pasacalle de la Vida), con una grabación de L’Arpeggiata junto al tenor italiano Marco Beasley, bajo la dirección de Christina Pluhar.

Pero antes de hablar sobre esta pieza, primero hablemos un poco sobre la pasacalle, una forma musical popular de ritmo vivo, de origen español de principios del siglo XVII.

Los músicos que tocaban esta forma musical, eran músicos ambulantes, de ahí la etimología de la palabra: pasar por la calle.

 

la pasacalle de la vida-Stefano_Landi
Stefano Landi.

La pasacalle se asemeja mucho a una forma musical de la que hemos hablado anteriormente en esta columna: la folía. Se caracteriza por el uso de un bajo ostinato (técnica de composición consistente en una sucesión de compases con una secuencia de notas que repiten exactamente en cada compás; de ahí su nombre en italiano, que significa obstinamento, empeño en repetir lo mismo) a tres tiempos (generalmente 3/4 o 3/2), sobre el que se suele improvisar, o escribir directamente variaciones en la partitura.

 

 

La semejanza entre la pasacalle y la folía era tan grande, que algunos compositores que escribieron música basada en estas dos formas, llegaban a indicar en el título Pasacalle, Folía, como si no estuvieran muy seguros de cómo clasificar lo que habían escrito.

Y de hecho, en la Alemania barroca, se dice que los músicos tampoco sabían diferenciar la pasacalle y la folía con la chacona. Tanto así, que algunos investigadores han determinado que la famosa chacona de Johann Sebastian Bach para violín solo, es realmente una pasacalle.

 

la chacona de la vida-larpeggiata
L’Arpeggiata junto al tenor italiano Marco Beasley, bajo la dirección de Christina Pluhar.

 

La pasacalle ha sido una de las formas musicales antiguas que más han perdurado a lo largo de la historia musical, adaptándose a cada nuevo estilo que surgiera durante los siguientes períodos.

La Pasacalle de la Vida no es una pieza muy compleja musicalmente hablando, pero está hecho así a propósito para permitirle a los instrumentistas expandirse en la improvisación, jugando con las posibilidades sonoras de su instrumento, y así darle sentido a la pieza. Cosa que los músicos de L’Arpeggiata consiguen a la perfección.

En esta grabación, los instrumentos utilizados fueron: dos tiorbas, una viola da gamba, una guitarra barroca, un contrabajo, una cítara y una percusión. La ensalada sonora generada por los rasgueos de la guitarra, la profundidad de los bajos y el sonido de la cítara, le dan además un buen sabor gitano a esta pasacalle italiana.

 

la pasacalle de la vida-marco beasley
El tenor italiano Marco Beasley.

 

Pero el verdadero significado de esta pieza, es el contenido de su letra, que el tenor Marco Beasley utiliza para encarnarse en un fuerte personaje con el que conseguimos conectar profundamente a través de su canto y sus expresiones.

Al leer la letra de la Pasacalle de la Vida, nos damos cuenta de que su protagonista, es la muerte. Nos parecerá irónico por el título, pero sí, esta pasacalle nos habla es de la muerte; y no como algo maligno, sino todo lo contrario. Reivindica a la muerte. Nos pone a todos en nuestro sitio. De manera directa nos dice que, por más cosas que hagamos, jamás podremos escapar de ella.

 

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¿Y por qué no se llama Pasacalle de la Muerte? Porque la vida y la muerte, no son dos cosas separadas. Porque la muerte también forma parte de la vida. Porque al final, a todos nos llegará; y eso no es ninguna maldad.

 

 

Traducción de la letra:

 

Oh, cómo te engañas a ti mismo,
pensar que los años nunca terminarán.
Debemos morir.
 
La vida es un sueño,
que parece tan dulce,
pero la alegría es demasiado breve.
Debemos morir.
De nada sirve la medicina,
ni siquiera la china,
no podemos curarnos.
Debemos morir.
 
Inútiles son las lamentaciones,
amenazas, bravuconería,
producido por nuestro coraje.
Debemos morir.
Sin doctrina aprendida,
puede encontrar las palabras,
para calmar esta osadía,
Debemos morir.
 
No hay medios
para desatar este nudo,
es inútil huir.
Debemos morir.
Es igual para todos,
un hombre astuto no puede
protegerse del golpe,
Debemos morir.
 
Muerte cruel,
es infiel a todos,
y avergüenza a todos.
Morir debemos.
Y sin embargo, oh locura,
o desvaríos,
parece mentirse a uno mismo.
Morir debemos.
 
Morimos cantando,
morimos tocando,
la cítara, la gaita, sin embargo,
morir debemos.
Morimos bailando
beber, comer;
con esta carroña,
morir debemos.
 
Jóvenes, niños,
y todos los hombres,
deben terminar en polvo.
Debemos morir.
Los sanos, los enfermos
el valiente, el indefenso,
todos deben terminar,
Debemos morir.
Y cuando en ello menos piensas,
en tu aliento,
todo llega a su fin,
Debemos morir.
Si no piensas en esto,
has perdido los sentidos,
estás muerto y puedes decir:
Debemos morir.

 

Pablo Manuel Agudo López / Ciudad VLC