El pasado 2 de junio se realizaron elecciones generales en México, que incluyeron muy en especial las elecciones presidenciales para el próximo periodo de gobierno 2024-2030. Resultó un holgado triunfo para la izquierda mexicana y los sectores progresistas en general, con la elección de la candidata Claudia Sheinbaum Pardo, dirigente política, académica y doctora en ingeniería energética, que asumirá como presidenta de los Estados Unidos Mexicanos, el próximo 1º de octubre de este año.
Fue la ratificación del proyecto de la llamada “Cuarta Transformación”, que inició en 2018 el actual presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO). Claudia Shenbaum nació en Ciudad de México un 24 de junio de 1962, recién cumplirá 62 años. Es hija del matrimonio del químico Carlos Shenbaum Yoselevitz, de origen lituano, y de la bióloga Annie Pardo Cemo, de origen búlgaro. Sus padres son descendientes de familias judías, que llegaron a México en los años 40, como exiliados anti nazi-fascistas, y son igualmente científicos.
Fue una reafirmación democrática y el apoyo popular irrestricto al proyecto emancipador, que ha encarnado el presidente en funciones López Obrador. La gestión de AMLO en estos seis años que están por concluir ha sido una reivindicación del pueblo y sus necesidades básicas como elemento central de su gestión de gobierno, que le ha valido el reconocimiento mayoritario de la población.
AMLO, junto a otros dirigentes populares, que incluyó a la actual presidenta electa Claudia Sheinbaum, fundaron en el año 2011 el “Movimiento de Regeneración Nacional” (MORENA), que ha venido batallando duramente por adecentar la actividad política en tierras mexicanas. Ellos han planteado, basados en la historia de esta gran nación latinoamericana, en la necesidad de construir una “Cuarta Transformación”, que avance en el presente, más allá de las tres principales etapas históricas: la independentista (1821), la de Reformas (1861) y la de “Revolución Mexicana” (1917), esta última donde se promulgó la actual Constitución Nacional (reformada en múltiples ocasiones), que devino luego adscrita a un neoliberalismo feroz, desde los años 80.
AMLO es un experimentado dirigente, de 70 años de edad, que ha escrito unos 17 libros sobre México y sus experiencias políticas, que saldrá del cargo con una aprobación de su gestión de un 80%. El promovió este relevo en un país que no admite la reelección, convencido de que habrá continuidad del proyecto en curso.
La doctora Claudia Sheinbaum, como primera mujer electa en los últimos 200 años de la historia mexicana, es una profesional comprometida, que ha combinado su carrera como investigadora y docente de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) desde 1995, con la actividad política desde sus tiempos de estudiante. Además de haber participado como Secretaria de Ambiente en la gestión de AMLO en la Jefatura de Ciudad de México en los años 2000-2005, fue electa igualmente Jefa de Gobierno en el Distrito Capital y se desempeño en ese cargo entre 2018-2023.
Luego participó en la encuesta para definir el candidato de MORENA para estas elecciones presidenciales, donde fue electa como abanderada. MORENA integró una alianza electoral con el Partido del Trabajo (PT) y el Partido Verde Ecológico de México (PVEM), denominada “Sigamos haciendo Historia”. Esta alianza ganó no solo la presidencia de la República, sino siete de las ocho gobernaciones, incluida la de Ciudad de México. Además alcanzaron al menos 365 diputados de 500 en disputa, 83 senadores de 128 totales, además de otras muchas localidades en los casi 20.000 cargos que se eligieron.
Claudia Sheinbaum fue favorecida con unos 35.000.000 de votos y un 58% de los votantes efectivos. La derecha mexicana totalizó apenas un 38% de votación. Inicialmente la principal candidata opositora aceptó los resultados y luego los los partidos opositores impugnaron la elección. AMLO opinó, “que se cuenten voto a voto”. Consideró que es posible que el margen sea mayor, favorable a MORENA. El triunfo de la doctora Claudia Sheinbaum es totalmente claro y contundente. El nuevo Congreso Nacional en ambas cámaras, se instala en septiembre y se aspira la aprobación de las reformas pendientes.
El objetivo transformador desarrollado por MORENA y sus aliados no es nada sencillo. Proponerse revertir el neoliberalismo establecido por cerca de 40 años es tarea compleja. AMLO ha sido perseverante en su actuación política, que le ha permitido sobrevivir a las elecciones presidenciales de 2006 y 2012, donde fue candidato y debió denunciar militantemente todas las irregularidades electorales que impidieron su triunfo en ambas ocasiones. Su victoria y asunción del poder en diciembre de 2018 significó algo inapelable y un gran reto en estos años de gestión, donde ha avanzado en importantes obras, con especial énfasis en lo social, que aspira sea fortalecido y ampliado en el futuro inmediato.
Según el “Informe México Justo” (2019), el país se caracterizó al inicio de ese año, parte del 25% de naciones con mayor desigualdad. Se alertaba de caciquismo clientelar, corrupción, impunidad selectiva, violencia criminal y enriquecimiento empresarial al amparo de contratos estatales. Esto no es fácil erradicar en 6 años de gestión. AMLO ha impulsado programas sociales y el combate a la desigualdad, junto a un conjunto de reformas, donde resalta el saneamiento del poder judicial, que está bastante desprestigiado. MORENA ha defendido un programa que reivindica a los pobres (“Por el bien de todos, primero los pobres”), el “mandar obedeciendo” y la actividad política como servicio. Defienden los principios de no mentir, no robar, no traicionar y ser austeros en la gestión pública. Se aspira la mayoría calificada en ambas cámaras, para aprobar las reformas necesarias aun pendientes.
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Claudia Sheinbaum señaló: “Venimos de lejos, este triunfo no es de ahora, se lo debemos a muchos y muchas que han luchado por nuestra patria, a hombres y mujeres que han dado su vida por nuestro país”. Agregó: “Con EEUU habrá relación de respeto mutuo e igualdad. Siempre defenderemos a los y las mexicanas que se encuentran del otro lado de la frontera”. El triunfo favorece a nuestra Patria Grande. México por su peso histórico, seguirá representando un refuerzo a la causa anti neoliberal, contra el neocolonialismo y en la búsqueda de un mundo multipolar y multicéntrico. En 2020-2021 México presidió la CELAC.
Con AMLO hubo solidaridad con Bolivia ante el golpe de Estado de 2019, brindándole asilo político a Evo Morales. Con Venezuela la relación es de amistad y respeto mutuo con el gobierno bolivariano. En Ecuador México facilitó asilo político al ex vicepresidente injustamente judicializado Jorge Glas, lo que provocó un ilegal asalto a su embajada en Quito, por el neoliberal Daniel Noboa, repudiado mundialmente. México es factor clave en la integración latinoamericana. Junto al resto de países que luchamos por nuestra emancipación e independencia plena, es una fuerza poderosa. Muchos éxitos en esa nueva gestión con Claudia Sheinbaum en el poder. ¡Unidos Venceremos!
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José David Capielo Valles es ingeniero agrónomo y magíster en Desarrollo Rural, egresado de la Universidad Central de Venezuela (UCV), Campus Maracay. Nacido en Coro, estado Falcón, en 1949. Es docente jubilado de la Universidad Nacional Experimental Simón Rodríguez (UNESR), Núcleo Canoabo (2016). Es locutor, comunicador alternativo y colaborador de Ciudad Valencia desde 2014.
La Universidad Politécnica Territorial de Falcón “Alonso Gamero” (UPTAG) publicó digitalmente, en noviembre de 2023, su libro “Del Medanal Venimos. Un ensayo autobiográfico reflexivo”.
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