La hipersexualidad se caracteriza por una frecuente estimulación visual que hace que el individuo exacerbe su natural sexualidad hasta la adicción.
Esto provoca que se auto estimule genitalmente y alcance el orgasmo o escale en mayores grados de placer.
El adicto al sexo se define por su comportamiento, el cual es fruto de sus deseos. La persona adicta al sexo mantiene una actividad sexual excesiva, habitualmente promiscua e incontrolada.
La hipersexualidad suele presentarse con las siguientes características:
- Varón joven con conductas machistas y egocentristas (en el caso de las mujeres recibe el nombre de ‘ninfomanía’).
- Problemas de control de impulsos, falta de concentración, ansiedad. La satisfacción sólo la obtienen en el momento.
- Persistente en su conducta a pesar de las consecuencias negativas
- Tienen pensamientos sobre temas sexuales casi de forma constante, obsesiva y de manera intrusiva.
- No es capaz de controlar su impulso sexual.
- Promiscuo, su conducta sexual es ocultada por no ser aprobada.
- Frecuentemente recurre a la masturbación, encuentros con desconocidos, cibersexo, pornografía, prostitución…
- El tiempo dedicado a la búsqueda de sexo le puede llevar al aislamiento, además de traerle problemas económicos y familiares.
- Baja autoestima.
- Presenta malestar similar al síndrome de abstinencia cuando no consigue mantener relaciones sexuales.
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Ciudad Valencia / Webconsultas
