Irracionalmente Humano lleva por nombre la muestra expositiva del artista visual venezolano Jesús Valero, inaugurada recientemente en el Museo de Arte Contemporáneo de Caracas. La apuesta del joven artista muestra la tensión entre los límites humano y animal.
El perro es el animal más cercano al hombre, con el que ha convivido y el cual ha sido utilizado de muchas maneras a lo largo de la historia de la humanidad.
El artista toma al perro como personaje fundamental de su obra, estableciendo un desdoblamiento, en tanto el ser puede asumir conductas irracionales en situaciones en las que se encuentra bajo amenaza; no así el perro, otorgándole una resignificación al representarlo como símbolo de trascendencia espiritual.
Socialmente, el perro es un animal humillado, golpeado, abandonado, que está sometido constantemente al sufrimiento. Mientras los seres humanos caminamos hacia la irracionalidad, el perro, por el contrario, lo supera.
En este sentido, su propuesta estética busca representar la búsqueda espiritual a través del perro como símbolo entre el límite de la vida y la muerte. Por un lado, el perro puede representar compañía, alegría, entereza y, por otro, también puede ser violento y devorador.
De esta manera, Jesús Valero nos invita a reflexionar sobre los valores de una sociedad de consumo que puede llegar a amaestrarse como un perro, al seguir un sistema económico, político o religioso.
El artista utiliza materiales de reciclaje, que fue recolectando en la calle, y de vestuario personal para proponernos una serie de obras en diversos tamaños y formatos.
Su obra se inscribe en la corriente del neoexpresionismo alemán, que surgió en la década del ’70 del siglo XX, cuyo planteamiento buscaba transmitir de manera violenta las emociones del ser humano; también toma en cuenta la propuesta del artista galés Barry Flanagan, quien dedicó su obra a la representación escultórica de animales, fundamentalmente de liebres, las cuales adoptaban expresiones humanas.
Jesús Valero recupera este planteamiento y representa las emociones a través de la imagen del perro, estableciendo un paralelismo con el animal.
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Si te encuentras en Caracas, te invito a visitar esta muestra.
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Vielsi Arias Peraza, Venezuela 1982. Poeta, docente, investigadora, columnista y promotora cultural. Ha publicado: Transeúnte (2005), Los Difuntos (2010), con el que obtuvo la mención honorífica en poesía del Premio Nacional de Literatura Stefania Mosca; La Luna es mi pueblo (2012), Luto de los Árboles (2021) y Mandato de puertas (2022). Es miembro del Consejo de Redacción de la revista Poesía de la Universidad de Carabobo, miembro de WPM, capítulo Venezuela, y miembro del equipo promotor de la Escuela Nacional de Poesía de Venezuela.
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