¿Qué es la inflación? Siguiendo al pie de la letra lo que dicen los textos de economía política, este odioso fenómeno consiste en el exceso de moneda circulante, que determina una baja en el precio de la misma y un alza general de precios. La explicación del mecanismo por el cual se produce, por qué se le da ese nombre, quién empleó por primera vez el término, es cosa que para nosotros, como para la mayoría de los mortales, es decir, de los consumidores, es chino o tal vez tibetano como toda la materia económica.
Por lo pronto, nos conformaremos con dejar constancia de que la palabra inflación viene del latín inflatio, distensión, inflamación, derivado del verbo inflare, “soplar en, tocar un instrumento de viento”, compuesto a su vez con la preposición in, en y el verbo flare, de igual significado. El término no puede ser más apropiado, porque en una situación inflacionaria los precios se hinchan como globos soplados por algún genio malvado.
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Irónicamente, algunos diccionarios latinos al registrar la voz inflado la definen específicamente “dilatación del estómago”, o sea exactamente lo que los venezolanos nombramos con la fea palabra aventazón.
Sin emitir opinión al respecto, sólo a título de curiosidad, concluimos informando que además de la dicha, el verbo flare tiene otra acepción: “batir, acuñar moneda”. ¿Casualidad? ¡Quién sabe!
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Tomado del libro “La palabra de hoy / Programa radial” (Cenal, 2014)
Autor: Aníbal Nazoa González (Caracas, 12 de septiembre de 1928 – Ibíd., 18 de agosto de 2001) poeta, periodista y humorista, considerado «uno de los escritores venezolanos que mejor retrató el siglo XX».
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