El canciller Yván Gil pidió a los países presentes a «accionar con más fuerza por el cese y erradicación de la práctica neocolonial de la aplicación de las criminales medidas coercitivas unilaterales, incluidas las personales, como por ejemplo las impuestas por los Estados Unidos o la Unión Europea a tres de los países soberanos que somos miembros de la Conferencia Iberoamericana», haciendo referencia a Cuba, Nicaragua y Venezuela.

Venezuela insistió en la necesidad de fortalecer los principios de soberanía y cooperación entre las naciones, así como denunció el impacto contra el desarrollo de nuestro país por la aplicación de medidas coercitivas unilaterales, durante la XXVIII Cumbre Iberoamericana que se realizó en República Dominicana.

 

Mencionó que nuestro país ha sido sometido, desde el año 2015, a 929 medidas coercitivas unilaterales, mientras que en bancos de Estados Unidos y Europa han sido secuestrados más de 7 mil millones de dólares, situación que dificulta la adquisición de medicinas, alimentos e insumos necesarios para la protección de la población.

 

El cese de la medidas coercitivas impuestas por EEUU

«No podemos hablar de una Iberoamérica justa y sostenible si no asumimos el compromiso de transformar el modelo impuesto por las grandes potencias dominantes, sus transnacionales y sus poderes fácticos», denunció.

 

 

Por otra parte, planteó la necesidad de alcanzar acuerdos para contar con un sistema financiero internacional justo, que se enfoque en el desarrollo y no en la politización.

En cuanto al cambio climático, señaló que el mundo «demanda mayor protagonismo de los pueblos para transformar las realidades impuestas por los imperios, corporaciones y un modelo fracasado de desarrollismo capitalista» que ha impuesto un modelo con efectos perversos y que «son producto de un errado modelo de consumo desmedido que agota aceleradamente los recursos naturales».

 

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Ciudad Valencia / AVN