Fantasmas de cristal en la wulfenita… La mayoría de los cristales que conocemos fueron, hace miles o millones de años, gases a los que se sometió a una gran presión en el interior de alguna cavidad rocosa.
La calidad, el color, la forma y el tamaño de los cristales depende del tipo o tipos de gases que había en tal cavidad, así como de la temperatura que imperaba en ella.
Los cristales tienen siempre formas geométricas muy particulares, con caras planas. El cuarzo, por ejemplo, siempre es hexagonal, es decir, tiene seis caras. El diamante también las tiene, pero en forma de cubo.
La razón por la cual un mineral toma siempre la misma forma cuando cristaliza es porque sus átomos no se unen al azar, sino del modo en que su estructura sea más sólida y estable.
Aparte del diamante y otras piedras a las que se da gran valor, existe un cristal muy escaso en la naturaleza, la wulfenita que, aunque de poco interés industrial y científico, es sin embargo muy apreciada por los coleccionistas de rocas y minerales.
La wulfenita recibió su nombre en honor a su descubridor, Franz Xavier Wulfen, un geólogo, mineralista, botánico y sacerdote jesuita austrohúngaro.
Está constituida por tres elementos: plomo, molibdeno y oxígeno. Por eso, también se le da el nombre de molibdato de plomo.
La wulfenita se presenta en varias tonalidades –amarillo cera, rojo anaranjado, pardo rojiza y hasta verde oliva–, pero la más frecuente es la segunda.
Este tipo de wulfenita resulta atractivo porque, si al color le sumamos su estructura cristalina, plana y transparente, pareciera que estamos en presencia de un apetitoso caramelo.
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El molibdato de plomo tiene otro atractivo que lo asemeja al ámbar y es que, si dentro de sus cristales han quedado atrapados trazos de otros minerales, se pueden observar en él figuras diversas, en su mayoría amorfas, por lo que la imaginación puede identificarlas como el objeto, animal o persona que se quiera.
A tales figuras, por cierto, en mineralogía se les da el nombre genérico de fantasmas.
En nuestros días, la wulfenita se consigue en unos pocos países: en Estados Unidos, China, México, Eslovenia y Zambia.
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Armando José Sequera es un escritor y periodista venezolano. Autor de 93 libros, todos publicados, gran parte de ellos para niños y jóvenes. Ha obtenido 23 premios literarios, ocho de ellos internacionales (entre otros, Premio Casa de las Américas, 1979; Diploma de Honor IBBY, 1995); Bienal Latinoamericana Canta Pirulero, 1996, y Premio Internacional de Microficción Narrativa “Garzón Céspedes”, 2012).
Es autor de las novelas La comedia urbana y Por culpa de la poesía. De los libros de cuentos Cuatro extremos de una soga, La vida al gratén y Acto de amor de cara al público. De los libros para niños Teresa, Mi mamá es más bonita que la tuya, Evitarle malos pasos a la gente y Pequeña sirenita nocturna.
«Carrusel de Curiosidades se propone estimular la capacidad de asombro de sus lectores».
Ciudad Valencia / Foto del autor: José Antonio Rosales
