Amar al prójimo como a uno mismo, nos dejó como tarea el primer revolucionario de la historia, nuestro Señor Jesucristo, una frase que unida a la solidaridad debemos practicar no solo de palabra sino en acciones concretas y eficaces.

Nuestro gigante Hugo Chávez nos exhortaba y cito textualmente: “Seamos como Cristo, como Bolívar, como el Che, como Manuela Sáenz: seamos verdaderos humanos. Potenciemos los valores humanos, el amor humano. He allí lo social”.

Este pensamiento del comandante Chávez, debe ser una acción diaria que todos los revolucionarios debemos emprender con pasión y convicción, el trabajo diario debe ser efectuado con amor y solidaridad que deben ir de la mano de la revolución bolivariana y profundamente cristiana.

Nuestro conductor de victorias el presidente Nicolás Maduro Moros casi a diario nos invita a practicar la revolución del amor y sobre todo la solidaridad y más aún en este tiempo de pandemia y guerra económica que el imperio mantiene sobre nuestra nación.

“Hoy más que nunca unidos en el amor, la solidaridad y el esfuerzo colectivo” nos decía hace poco el presidente Maduro.

Es válido citar al Papa Francisco que el pasado fin de semana firmó su tercera encíclica la cual título “Hermanos Todos”, inspirada en San Francisco de Asís y busca definir y exaltar la fraternidad como valor y elemento ordenador de las sociedades, las naciones y la convivencia mundial.

Asimismo, el pontífice condena al capitalismo salvaje que tanto daño hace a las naciones y busca implementar en el mundo una revolución de amor y solidaridad basada en el hermano, o mejor dicho, en el prójimo sin distinción de naciones, razas o credo.jesucristo

 

Allí mismo el Papa resalta que también le inspiraron en la elaboración de la encíclica numerosos personajes mundiales no católicos, como Martin Luther King, Desmond Tutu y Mahatma Gandhi entre otros.

Practiquemos la revolución del amor y la solidaridad como ley de vida.

Con Dios Venceremos.

 

Doily Hernández Marín/ @doilyhernandezm