Semana bastante agitada en el fútbol europeo y con muy malas noticias para los clubes, pero no precisamente por el Covid-19. Esta vez son las finanzas de los equipos lo que prendió las alarmas.
A partir del 2008, la Crisis Financiera en Estados Unidos y luego al resto del mundo, hizo que muchos capitales migraran hacia al mundo del deporte, sobre todo al fútbol de Europa, viendo una oportunidad de inversión segura de su dinero.
Esto hizo que a los principales clubes les entrara mucho dinero y pudieran remodelar estadios, hacer fichajes muy caros, para llevarse a los mejores jugadores sin importar su precio.
Tanto fue así que el Real Madrid se dio el lujo de adquirir a Christiano Ronaldo, desde el Manchester United al año siguiente, por una exorbitante suma de dinero.
En este momento que las vacas están flacas, los clubes suman deudas multimillonarias y déficits en sus ingresos.
Los dirigentes pretenden, apoyados por sus Federaciones y la UEFA, hacer pagar esta crisis a los jugadores, rebajando sus sueldos y beneficios, hasta romper sus contratos y enviarlos gratis a otros equipos.
A los que nos trae la siguiente pregunta, ¿en realidad fue la pandemia lo que generó esta crisis?
Esto no es nuevo en el sistema capitalista, cuando una empresas están mal económicamente optan siempre por tomar este tipo de medidas, para no perder sus beneficios, y que los trabajadores sean los que paguen el desastre que ellos cometieron.
Ya los clubes no son tal, la palabra de “Club” quedó como un adorno, antes eran muchos socios accionistas los dueños de ellos. Ahora el Barcelona, el Madrid y el Athletic Club de Bilbao, ente otros, aún mantienen ese estatus. La UEFA los está presionando para que cambien su modelo empresarial.
En este momento, la mayoría de los equipos poderosos europeos se convirtieron en Compañías Anónimas, donde un pequeño grupo de capitalistas tratan de sacar el mayor beneficio a su inversión, pero poco a poco están socavando la sostenibilidad del deporte.
Desde la década pasada, y eso se aceleró con la Crisis del 2008, los capitales foráneos, empresarios y capitales de riesgos han ido comprando clubes que entraron en bancarrota, y eso cambió el negocio del fútbol en Europa y el resto del mundo.
Asimismo, los clubes europeos tenían bastante dinero para acaparar los mejores jugadores del planeta y podían endeudarse sin límites, hasta que el Fair Play Financiero fue creado, para sanear las finanzas de los clubes y estos no gastaran más de lo que podían generar.
Pero aun con todo eso, los equipos están en números rojos y muy endeudados, tanto con sus financistas y con sus propios trabajadores, que en algunos casos ya llevan meses sin cobrar, sobre todo en los clubes mas pequeños.
Esto ya es insostenible y podría derrumbarse todo a partir de esta temporada.
La crisis que la paguen los jugadores…
Esto ya se veía venir, muchos analistas proyectaban que el modelo se estaba agotando y la pandemia lo que hizo fue acelerar el proceso de quiebra. Ahora nos quieren hacer creer que el problema son los altos salarios de los jugadores, cuando en realidad a estos le han sacado el máximo beneficio monetario posible.
Pero lo más asombroso es lo siguiente, los dirigentes de los clubes hicieron y deshicieron, como quisieron, manejaron grandes sumas de dinero, pagaron por jugadores precios altos cuando se sabía que el precio no representaba la calidad del jugador, pero que sí les dejaron jugosas comisiones y se malversó mucho dinero.
Ya eso no importaba, los recursos eran ilimitados, eran aportados por el marketing, los derechos televisivos y, con la explotación de la imagen de los futbolistas, eso era suficiente y les daban muchos beneficios, lo cual recuperaban el capital invertido de forma muy rápida.
Pero aún siguen empeñados desde los medios en hacernos creer que el problema son los altos contratos y beneficios de los jugadores, cuando en realidad se trata de derroche por parte de las directivas de los clubes, que al final, ellos nunca son los culpables.
En algún momento todo esto tenía que estallar, apenas estamos viendo la punta del iceberg, lo que está en las profundidades debe ser mucho más oscuro de lo que creemos.
Según datos aportados esta semana y publicados en la prensa especializada de todo el mundo da cuenta de ello.
El 15 de noviembre el máximo dirigente del fútbol español, Javier Tebas, detalló en una entrevista, en Marca Sport Weekend, que la liga de su país tiene un déficit de unos 500 millones de euros.
Tebas destacó lo siguiente: «Se ha hecho un ejercicio de reducir masas salariales» pero «todavía tenemos un exceso de gasto de unos 500 millones» le explico al entrevistador.
También destacó: «Ya se ha perdido alrededor de un 45% de lo previsto en ticketing» y los equipos, para paliarlo, «no han podido sacarse a los jugadores con los contratos», por lo que «algunos clubs» tendrán que «reducir otra vez las masas salariales».
Agregó el dirigente: «Los mayores afectados son Valencia, Barcelona o Real Madrid, que no se pueden quitar a los jugadores».
Esto no solo está pasando en España, sino en todas las ligas importantes del viejo continente.
Los futbolistas de los equipos mas pequeños los mas afectados
Da risa cuando uno lee que el presidente de tal club habla de rebajar los sueldos a los futbolistas, y que hay que hacer sacrificios por la institución, pero no dicen, ni por casualidad, que también ellos van a rebajarse el sueldo y sus beneficios; para nada vas a escuchar eso.
La mayoría de los futbolistas no son como Lionel Messi, Christiano Ronaldo, Neymar o cualquier otro jugador élite del fútbol internacional, que pueden hacerse una rebaja de sus contratos y no pasa nada.
Son jugadores que han hecho inversiones y se han convertidos empresarios capitalistas, ganan dinero con solo respirar.
En cambio los demás futbolistas tienen sueldos normales, y muchos de ellos no llegan al millón de euros anuales por contrato, y al final siempre son los más explotados y maltratados en los clubes de fútbol. Hay muchos ejemplos, pero no los voy a tratar ahora, quedará para otro tema más adelante.
Sin embargo, lo único que sí puedo decir a favor de los cracks del fútbol es que se ganaron esos contratos multimillonarios por constancia y porque de verdad son estrellas, nadie les regaló nada. Ahora culparlos porque los clubes no pueden pagar las cifras millonarias por lo elevado de sus contratos ¡No me vengan con bromas!
La especulación con precio de jugadores devaluó el mercado de pases
El fútbol actual lo mueve mas el dinero, por encima del jugador, mucho más que en otras etapas del deporte rey, los dirigentes son los que toman las decisiones financieras y son los que ponen las cifras sobre la mesa.
Hoy el fútbol tiene pocas estrellas, no hay tantos jugadores destacados como en otras eras y eso también ha alimentado la especulación de sus fichas en los mercados de pases.
Por eso, hoy te puedes encontrar que un jugador con proyección, te lo quieran vender en 140 millones de euros, cuando hace una década, un jugador con esas mismas características, costaba máximo 30 millones y todavía algunos expertos en el tema decían, que era una barbaridad pagar ese precio.
Eso pasó desde la llegada de estos “capitales” al fútbol, ejemplos, el Manchester City y el Paris Saint-Germain son muestra de ello, y no los únicos.
Fueron equipos adquiridos por empresarios árabes con mucho dinero. Empezaron a hacer contrataciones multimillonarias para armar equipos ganadores en el corto plazo, que al final terminó dañando el mercado de fichajes. No lo digo yo, eso lo dijeron en su oportunidad los dirigentes de los clubes.
¿El Covid-19 o el Capitalismo son los culpable de la crisis?
Para cerrar, quiero dejar claro que el capitalismo está en una de sus crisis más severas de su historia, y el mundo del fútbol está empezando a sentir sus efectos de manera más aguda.
La pandemia del Covid-19 aceleró la bancarrota de las ligas y sus dirigentes ahora están pidiendo a los estados que las rescate de la quiebra, porque el Fondo de Rescate de la UEFA, no alcanza.
Lo cierto es que las ligas están en riesgo y se habla hasta de su desaparición. Los clubes más poderosos, como escribí en mi artículo sobre la Superliga de Fútbol de Europa, cada vez toma más protagonismo, y se suman más voces a favor de su creación.
A los clubes grandes no les va a importar acabar con una tradición de más de un siglo, con tal de no perder su posición dominante en el fútbol mundial, y sería catastrófico para el deporte rey que esto sucediera, por la cantidad de trabajadores que quedarían desempleados.
Lastimosamente la UEFA ya no tiene la capacidad de cambiar esta situación en el corto y mediano plazo, por eso están presionando a los gobiernos para que levanten las restricciones en los estadios y creen ese fondo de rescate que calculan en unos 4.000 millones de euro.
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Pero todo apunta a que todavía en Europa es imposible por el repunte de los casos de Covid-19 y los gobiernos también están sufriendo los embates de la crisis económica.
Entonces allí es donde yo digo, que el fútbol está enfermo, pero no precisamente de coronavirus, sino de otra enfermedad llamada “capitalismo”
Joan Planas / Ciudad VLC
