“El cereal de las olas doradas” por Armando José Sequera

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Armando José Sequera, autor de la columna: Carrusel de Curiosidades

Uno de los tres productos agrícolas que más se consumen en el mundo es el trigo. Los otros son el arroz y el café.

De las siete especies de trigo que existen derivan cientos de tipos de este cereal, a los que se clasifica según la consistencia de sus granos en blandos, semiduros y duros.

De los trigos blandos y semiduros se obtiene la harina que se emplea en panaderías y pastelerías, en tanto de los duros se consigue la que sirve para fabricar pastas.

Su relación con la humanidad se inició, aproximadamente, hace 11.000 años. Fue, según se considera, la primera o una de las primeras plantas que se cultivaron en Mesopotamia, la cuna de la civilización occidental.

 

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Entonces fueron sembradas semillas de trigo escaña y farro, dos ancestros del trigo que conocemos y consumimos en nuestros días.

Sin embargo, otras culturas de África, Europa y Asia mantienen una disputa por el origen del cereal, ninguna de las cuales ha sido avalada por hallazgo arqueológico alguno.

Por mucho tiempo se creyó que la región originaria del trigo fue Egipto, por inscripciones en monumentos y sepulcros de esta nación referidas a su cultivo a orillas del Nilo.

 

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Otra hipótesis aseguraba que el cereal provenía de Siberia, de una zona que anteriormente perteneció a China, donde se siembra desde hace más de cuatro mil años.

Hoy sabemos, por diferentes estudios, que en efecto el trigo atrajo la atención humana a orillas de un río, el Éufrates. Fue allí donde, atraídas por las doradas olas que produce el viento cuando acaricia las concentraciones de espigas, las mujeres prehistóricas concibieran la agricultura e hizo que la especie humana se volviera sedentaria.

 

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Armando José Sequera es un escritor y periodista venezolano. Autor de 93 libros, todos publicados, gran parte de ellos para niños y jóvenes. Ha obtenido 23 premios literarios, ocho de ellos internacionales (entre otros, Premio Casa de las Américas, 1979; Diploma de Honor IBBY, 1995); Bienal Latinoamericana Canta Pirulero, 1996, y Premio Internacional de Microficción Narrativa “Garzón Céspedes”, 2012).

Es autor de las novelas La comedia urbana y Por culpa de la poesía. De los libros de cuentos Cuatro extremos de una sogaLa vida al gratén y Acto de amor de cara al público. De los libros para niños TeresaMi mamá es más bonita que la tuyaEvitarle malos pasos a la gente y Pequeña sirenita nocturna.

«Carrusel de Curiosidades se propone estimular la capacidad de asombro de sus lectores».

 

Ciudad Valencia / Foto del autor: José Antonio Rosales